Corte británica acepta apelación de EE.UU. en caso contra Assange

En enero pasado, la magistrada Vanessa Baraitser se rehusó a entregar al periodista australiano a la justicia norteamericano, que quiere juzgarlo por denunciar en WikiLeaks crímenes de guerra cometidos por las tropas norteamericanas en Iraq y Afganistán, y publicar cables secretos de la diplomáticos del Departamento de Estado.

De ser entregado a la justicia norteamericana, Assange podría ser condenado a 175 años de cárcel, por lo que la jueza británica consideró, a partir de las valoraciones hechas por psicólogos y psiquiatras presentados por la defensa, que el ciberactivista podría atentar contra su vida.

El fundador de WikiLeaks está encerrado en una prisión de máxima seguridad británica desde su detención en la embajada de Ecuador en Londres en abril de 2019, luego de un asilo de casi siete años en esa legación diplomática por temor a ser entregado a los fiscales norteamericanos.

Pese a rechazar el pedido de extradición en primera instancia, la jueza Baraitser determinó que Assange debe esperar en la cárcel a que la justicia del Reino Unido decida su suerte, en un proceso que según su abogada defensora Jennifer Robinson podría demorar varios meses.

El caso contra el periodista australiano se tambaleó días atrás después que un testigo clave presentado por los fiscales para sustentar el cargo de conspiración para cometer piratería informática admitió en una entrevista que mintió a cambio de inmunidad.

Assange enfrenta además otras 17 acusaciones de violar la ley de Espionaje de Estados Unidos que data de 1917.