Pioneros santacruceños felicitan a los Comités de Defensa de la Revolución
En las cuadras de Santa Cruz del Sur esta vez nadie vio la novela, el bullicio de los pioneros invadió los barrios de este territorio, para felicitar por anticipado a los CDR (Comités de Defensa de la Revolución) por su 52 cumpleaños. Organización con una tradición enorme, de profunda belleza, cargada de enseñanzas.
Niños y niños dejaron sus uniformes de reserva para las actividades nocturnas de esta jornada de septiembre, a modo de dar más colorido a la celebración de la familia grande, siempre unida, más consolidada en la solidaridad entre vecinos.
Los estudiantes conocieron de la historia de los Comités, además de la importancia de las tareas que ejecuta, durante conversatorios e intercambios emotivos, con fundadores y dirigentes de base.
Aunque la Organización de Pioneros José Martí nació un año después que los CDR, han recibido el legado de sus heroicas jornadas, donde se multiplicaron los desvelos para salvaguardar la obra no exenta de sacrificios y que tanta sangre ha costado.
Junto a los padres y vecinos, los pioneros se afanan en la recogida de materias primas; el ahorro; el apoyo a la higienización; manteniendo la limpieza en patios, jardines, áreas verdes y dándole una batalla sin tregua a todo tipo de vectores.
La OPJM unida y combativa sigue con la guardia en alto para mantener la firmeza heroica de los Comités, desde los cuales los santacruceños esperaremos este nuevo aniversario, apoyando la actualización del modelo económico, social y político cubano; el desarrollo del curso escolar; el Censo de Población y Viviendas y el proceso eleccionario de los delegados a la Asamblea Municipal del Poder Popular.
Preservar lo logrado
“A nosotros nos toca, además de estudiar para ser útiles a la Patria, también contribuir con el ahorro de la electricidad y el agua, la recogida de materias primas para su reciclaje, pues la economía lo necesita, así llegaremos a la edad apropiada: los catorce años, para integrar los CDR”, manifestó Yenifer Torres Vargas.
Asiel Guerra de la Cruz, se acaba de ganar una estrella en su aula de preescolar, “por portarme bien. Quiero regalarle un beso grande como el cielo a los cederistas. Puedo decirles que ya me sé los colores y otras cosas más…y que cuando sea grande seré un cederista como mi mamá y mi papá”.
“En las escuelas lo pedimos y en las cuadras también: que liberen a los Cinco cubanos presos en los Estados Unidos. Sabemos de sobra que ellos no son terroristas. Aquí en el CDR le hicimos un sitial, son unos cederistas muy valientes”, planteó Raúl Rodríguez Medina.
Milagro Laura Muñiz Liza, trae en el segundo ojal de su blusa escolar una estrella “parpadeante” de color azul, “fue un regalo de la maestra por hacerle caso en todo lo que ella dice”. Aún es muy pequeña, pero sabe que todas las luces de la casa no pueden estar encendidas innecesariamente. “A mi mamita le digo que no podemos gastar tanta corriente, pues eso también no los enseña la maestra. Yo soy de la patrulla ‘clic’”. (Radio Santa Cruz)
