Bloqueo de Estados Unidos contra Cuba limita producción de psicofármacos
Camagüey, 10 mar.- Las irregularidades en la disponibilidad de medicamentos básicos para las personas con trastornos mentales, que llevan tratamientos de larga evolución por sus enfermedades crónicas, constituyen una de las principales afectaciones provocadas por el bloqueo económico de Estados Unidos contra Cuba al limitar su producción y abastecimiento.
La doctora Ana Josefa Suárez Varona, vicedirectora de Asistencia Médica en funciones en el Hospital Psiquiátrico Comandante René Vallejo, de Camagüey, comentó que las características del cuadro clínico de los pacientes siquiátricos denotan mucha ansiedad, por lo que resulta fundamental la garantía de sus medicinas.
En el caso, por ejemplo, del clordiazepóxido, la trifluoperazina, el alprazolam o el diazepam requieren materias primas importadas procedentes de la India y China, y al no llegar a tiempo, provocan que en muchas ocasiones se detengan las cadenas productivas.
Según argumentó Suárez Varona, en el 2021 el cuadro básico de medicamentos tuvo alrededor del 30 por ciento de los medicamentos aplazados porque no pudieron producirse ante la falta de materias primas.
Estas dificultades conllevaron a varios cambios de tratamiento, lo cual se evidenció en mayores crisis de la enfermedad y más ingresos en la institución.
Al valorar al paciente de enfermedades mentales de manera integral, las afectaciones también se evidencian en las limitaciones con los reactivos y los rayos X para pruebas complementarias que se integran en su atención médica.
Existen, además, fármacos del primer mundo como los neurolépticos para casos de psicosis y algunos antidepresivos que tienen menos reacciones adversas y aumentan su calidad de vida, que no se les pueden indicar porque el bloqueo impide comprarlos directamente en Estados Unidos.
Explicó la especialista que el negativo impacto de esa política hostil en nuestra sociedad no puede verse solamente desde el punto de vista económico y financiero, sino sobre todo como una medida irracional e inhumana que afecta la calidad de vida de las personas, más si tenemos en cuenta que para el 2030 la depresión va a ser la mayor causa de discapacidad mental entre la población. (Fuente: Radio Cadena Agramonte)
