Gatos peligrosos para la biodiversidad

Gatos peligrososLos gatos asilvestrados son una de las especies invasoras más perjudiciales para las comunidades de vertebrados que viven en en islas, de acuerdo con un estudio dirigido por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Los análisis revelan que, a lo largo de la historia, la acción de estos felinos ha contribuido a la desaparición de, al menos, el 14% de los vertebrados extintos. Actualmente, su presencia amenaza, además, la supervivencia del 8% de las especies de aves, mamíferos y reptiles catalogados como en peligro crítico por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

El trabajo, publicado en el último número de la revista Global Change Biology, se basa en una revisión bibliográfica de 229 casos en 120 islas del mundo. Los análisis revelan que los gatos asilvestrados están presentes la mayoría de las aproximadamente 179.000 islas que hay en todo el mundo. “Estos entornos albergan una biodiversidad muy particular y de gran valor, ya que muchas de sus especies son endémicas y el territorio insular suele ser limitado, por lo que este tipo de impacto es mucho más grave”, explica Manuel Nogales, el investigador del Instituto de Productos Naturales y Agrobiología del CSIC.

A nivel global, las regiones insulares más afectadas históricamente por la acción de este felino son las Galápagos (Ecuador), Hawaii (EEUU), algunas islas del Caribe y las Canarias. Los datos demuestran que la biodiversidad de los dos archipiélagos españoles también se ha visto afectada por la acción de estos gatos. Los lagartos gigantes endémicos de La Gomera y El Hierro, catalogados en peligro crítico por la UICN, “ya sólo habitan en ciertos acantilados donde los gatos tienen difícil su acceso”, explica el investigador del CSIC.

Durante la investigación, el equipo identificó algunos casos llamativos donde el gato ha jugado un papel fundamental en la extinción de algunos vertebrados, como el del chochín de Stephens (Traversia lyalli) en el Estrecho de Cook (Nueva Zelanda) y la tórtola de Socorro (Zenayda graisoni) en México, cuya especie está extinta en la naturaleza y sus únicos efectivos existentes se encuentran en cautividad. Además, algunas subespecies del ratón endémico (Peromyscus guardia) de Baja California (México) se han extinguido en varias islas. El lagarto gigante de La Gomera (Gallotia gomerana), con una población exigua en la naturaleza, constituye uno de los reptiles más amenazados del planeta, asegura Nogales.

Para evitar los perjuicios de su presencia sobre la biodiversidad insular, Nogales recomienda “la erradicación total de gatos asilvestrados en islas de superficie inferior a 200 kilómetros cuadrados y el control de sus poblaciones en aquellas de mayor tamaño donde el perjuicio causado sobre la biodiversidad sea destacable”.