Paradigma universal

Paradigma universalQuienes  nacimos después del triunfo del 59, aprendimos a amar a la Revolución Cubana desde la cuna; luego el quehacer cotidiano y la educación permanente en el hogar y en los centros educacionales  nos hizo respetarla.

Con el devenir de los años fomentamos valores y sentimientos patrióticos que son inherentes a los cubanos y que forman parte de esa  estirpe revolucionaria heredada y transmitida de una generación a otra.

Para los que lucharon por la libertad de la Patria, la victoria de aquel inolvidable Enero significó más que un sueño hecho realidad, porque lo que calificó Cervantes, entre otras denominaciones, como cambio radical en las instituciones políticas, fue descrito por Fidel en el concepto de Revolución, el primero de Mayo de 2004.

Y es que “…cambiar todo lo que debe ser cambiado…”, resumen la firme decisión de mantener nuestras conquistas, con énfasis en el bienestar de la sociedad culta, equitativa y justa que construimos cada día con nuevos proyectos. Muchos principios como la solidaridad, el internacionalismo y el altruismo, forman parte de  esa definición certera que encierra los valores más preciados del estadista que gestó el concepto. 

Los cubanos tenemos en esas líneas la guía necesaria de cada paso que damos, la inspiración eterna de seguir adelante, y la fiel convicción de que aplicarlas es conquistar un mundo mejor.

En el todavía joven siglo XXI, son muchos los retos y quimeras, mas “…luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo…”, se alza como premisa imprescindible de este proyecto social, que colmado de grandes hazañas, constituye hoy paradigma universal.(Yanayma Rodríguez Molina/ Radio Santa Cruz).