Al sur

Buscan en Biblioteca Pública santacruceña proteger vida útil de libros (+ Fotos)

Santa Cruz del Sur, 8 feb.- Cuantioso encanto a lo profundo del alma y la mente dan los libros al asiduo lector. Es por ello que los volúmenes de la biblioteca pública Jesús Suárez Gayol no tienen total reposo en los estantes.

La institución está ubicada en el apartamento 17 del edificio multifamiliar número tres, situado en la comunidad de igual nombre, alejada 20 kilómetros de la cabecera municipal santacruceña.

Halatiel Pozo Ramos, la especialista principal del bien aprovechado pequeño espacio, hace honor a su labor. “Mi madre me puso ese nombre inspirada en un personaje de uno de los cuentos de El Decamerón, escrito por Giovanni Boccaccio”, quiso revelar al periodista.

La entrevistada hizo referencia a la programación cultural que tienen cada mes para acrecentar la promoción de la lectura en los grupos etarios.

“Al confeccionar nuestro plan de actividades, mencionó, tenemos en cuenta las efemérides históricas a fin de motivar fundamentalmente a infantes, adolescentes y jóvenes al estudio de la historia local y nacional”.

Bastante extensa es la superficie rural atendida por las trabajadoras de la Jesús Suárez Gayol. “Visitamos a las compañeras encargadas de las casas-bibliotecas y minibibliotecas en La Cupertina, Monte Grande y otros sitios distantes.

Además, vamos a los planteles escolares, no importa lo intricado que algunos estén, donde mantenemos excelentes vínculos con las bibliotecarias que en ellos laboran.

Saber leer es saber andar, expresión martiana de gran significado para las nuevas generaciones. Por eso les inculcamos tanto desarrollar ese hábito; los libros son extraordinarios amigos”, manifestó la joven Katia Rodríguez Rivera.

Dentro de toda esta faena late el cadencioso ritmo literario en las bebetecas, a las que asisten con sus padres los pequeños del programa Educa a tu Hijo.

“Poseemos, incluso, buró de préstamos en centros laborales. Esto facilita al trabajador solicitar el pedido del texto que le interesa”, añadió la Rodríguez Rivera, encargada del área de extensión.

Mayelín Vázquez Roldán habló de cuán riguroso es habilitar los libros en el momento que se sacan del almacén, siendo necesario hacer anotaciones en boletas, fichas y en el registro destinado a tal propósito, para especificar el título y nombre del autor. “Protegemos como guardianes la vida útil de cada texto”, destacó.

La santacruceña biblioteca pública Jesús Suárez Gayol requiere de nuevos títulos en sus estantes, sobre todo novelas y cuentos, por ser este tipo de literatura la más solicitada por los usuarios.

Por Raúl Reyes Rodríguez, tomado de la página en Facebook de Cultura Santa Cruz del Sur.