La COVID-19 vuelve a perjudicar al fútbol mundial
Pinar del Río, 2 ene.- La COVID-19 pone en aprietos al mundo del fútbol nuevamente. Las principales ligas del fútbol europeo no escapan a los embates de la variante Ómicron y sus elevados niveles de contagio.
Las últimas semanas devolvieron al fútbol a los tiempos de la incertidumbre y la precaución por la pandemia de la COVID-19 que afecta al planeta. Una nueva ola de contagios de la que no escapan aficionados ni jugadores obligó a tomar medidas drásticas que tornan la alegría en preocupación.
A finales de noviembre último el primer ministro de Baviera, Markus Söder, anunciaba que todos los partidos de esa región alemana volverían a celebrarse a puertas cerradas.
Era la primera acción retomada luego del relajamiento en las medidas justificado por el descenso de los contagios a nivel global. Ello condujo a que un partido de tanta importancia como el de Bayern ante Barcelona en la última fecha de la Uefa Champions League se jugara sin público.
Apenas unos días antes el mismo club teutón reconocía un brote a lo interno de la entidad, en el cual relucía la figura de Joshua Kimmich, quien se había negado a vacunar. Para quienes pensaron que el fenómeno estaba localizado y solo la Bundesliga sería víctima del “retroceso”, pronto llegarían las malas noticias.
La situación en la Premier League inglesa se tornó muy compleja, una consecuencia relativa al alto nivel de positivos en Reino Unido, donde en las últimas semanas se ha pospuesto alrededor de 20 partidos.
La situación está lejos de tener final. Tan cercano como el pasado 26 de diciembre, el Wolverhampton debió suspender hasta nueva fecha el partido ante el Arsenal por un brote dentro del equipo, el segundo en apenas días, luego de no poder jugar ante el Watford.
Y no fueron los lobos el único equipo implicado en este inoportuno fenómeno sanitario, sino que otros clubes como Liverpool, Tottenham, Manchester United y hasta Chelsea, entre otros, protagonizan el complejo escenario.
En Italia algunos clubes importantes como la Juventus de Turín y el Inter de Milán este 30 de diciembre han parado la venta de entradas para los próximos partidos.
Ante el aumento de casos positivos de covid-19 los directivos de la Serie A decidieron, por lo pronto, reducir la entrada de aficionados a la mitad de la capacidad de los estadios.
A la medida se sumaron otros clubes importantes como Roma y Lazio, que han suspendido la venta para sus próximos partidos. El conjunto de Nápoles hizo lo mismo, incluso para el encuentro que jugarán en casa en febrero próximo ante el Barcelona en la Europa League.
La Serie B, por su parte, se convirtió en la primera liga en parar su actividad temporalmente por el rebrote. Lo hicieron desde el pasado 24 de diciembre después de postergar varios juegos. Se prevé retomar las acciones a mediados de enero, aunque sus directivos explicaron que dependería de la situación epidemiológica.
La Liga, acaso el campeonato más seguido en Cuba, vive momentos complejos por el sexto rebrote con epicentro en los dos clubes con más aficionados en el mundo: Real Madrid y Barcelona.
Los blancos, líderes de la clasificatoria, ya sufrieron la perdida de nueve jugadores por resultar positivos a los exámenes PCR, entre los que resaltaban piezas clave como Luka Modric, Marco Asensio, Rodrygo Goes y David Alaba, sumados a otros con menos continuidad como Isco, Gareth Bale o Marcelo.
Luego de las vacaciones por fin de año, la situación en el conjunto merengue no ha estado controlada. Al regreso a la concentración en Valdebebas cinco jugadores (Thibaut Courtois, Fede Valverde, Eduardo Camavinga, Luka Jovic y Vinicius Jr.) resultaron positivos en tests reglamentarios.
Horas antes del partido de este domingo ante Getafe, solo Vinicius Jr. y Jovic siguen de baja. Se espera que algunos de los recuperados se incorporen a las órdenes de Carlo Ancelotti, a pesar de no haber entrenado con el resto. Se estima que más de 20 futbolistas de club han padecido la enfermedad.
Peor situación atraviesa el Barça. A la compleja crisis que sufre el club se suma la imposibilidad de contar con varios jugadores por un brote interno.
A los casos de Dani Alves, Clément Lenglet, Samuel Umtiti, Jordi Alba, Alejandro Balde, Gavi y Ousmane Dembélé se suman otros tres: Sergiño Dest, Philippe Coutinho y Ez Abde. Ahora suman diez las bajas para Xavi de cara al partido ante Mallorca el domingo.
El DT catalán deberá tirar del filial luego de contar con solo diez futbolistas del primer equipo disponibles.
A pesar de presentar situaciones más complejas, no son estos los únicos clubes de La Liga que sufren la pandemia, otros como Huesca, Celta y Valladolid también se aquejan de positivos dentro de sus plantillas.
Quienes confiaron en que los duros momentos del pasado habían terminado no podían estar más equivocados. Queda hacer lo necesario para evitar el escenario trágico de las muchas pérdidas humanas y, si fuera posible, evitar a toda costa que el coronavirus impida que siga rodando el balón. (JIT)
