Amor por la psicología distingue a joven santacruceña
Santa Cruz del Sur, 13 abr.- “Desde que estaba en la enseñanza Secundaria Básica me llamó mucho la atención la Psicología y empecé a investigar para formarme vocacionalmente. Me gustó mucho lo que leí y escuché y así fui trabajando para tratar de alcanzar esta profesión”.
Con gran admiración y orgullo por el camino transitado, la santacruceña Lidia Esther Méndez Villafaña, hoy habla de la carrera que estudió y de los casi 10 años que lleva ejerciéndola para satisfacción personal y de toda su familia.
“Luego del Preuniversitario me hice Técnico Básico, después Medio y en el 2014 me gradúo como Licenciada en Psicología y comienzo a trabajar en el Grupo Básico de Trabajo (GBT) del políclínico Ernesto Guevara”.
En este centro del área de salud de la ciudad cabecera del territorio, la joven brinda ayuda psicológica a pacientes de programas como las ITS (Infecciones de Transmisión Sexual), la citología, el PAMI (Programa Materno Infantil), Neurodesarrollo, entre otros.
“A pesar de las dificultades que se puedan ir presentando en el camino, me gusta la carrera que estudié y ayudar a las personas que acuden a mí. Me gusta cuando llega alguien y puedo satisfacer de cierto modo las dudas, necesidades o inquietudes que puedan tener, ya sea por alguna situación, evento o lo que realmente estén pasando.”
¿Cómo parte de tu profesión, cuáles han sido los situaciones más difíciles que has tenido que enfrentar?
“Se me ha hecho difícil, por ejemplo, algún caso que llega, que, aunque conozca la patología y me nutra de información, sea novedoso porque nunca haya atendido uno similar y me remite al estudio nuevamente, a buscar información para lograr que el paciente resuelva su situación y se sienta satisfecho con las orientaciones. En ocasiones me han llegado casos donde está presente la violencia familiar, de género y luego de las orientaciones y terapias a brindar, se manda para el Centro Comunitario de Salud Mental.
En este tiempo de pandemia, desde la casa Lidia ha puesto en práctica las técnicas de su profesión para desempeñar además el rol de maestra y mamá, inculcándole a su pequeño Raciel los conocimientos de las asignaturas y ayudándolo a esclarecerlos.
Aunque no está trabajando directamente en el área de salud, ella igual se ha mantenido activa a través de la telepsicología, orientando a las personas que mediante las redes sociales se comunican con esta psicóloga. En ese proceso atendió a ciudadanos que estaban en deshabituación tabáquica, a quienes orientaba sobre lo que debían hacer y cómo seguir con la terapia desde el hogar.
La Psicología como profesión humanista, enorgullece y satisface a esta joven santacruceña de 30 años de edad, quien continuará en este camino que inició hace 10 años, para ayudar a personas de su apoyo y comprensión.
