internacionales

Organizaciones critican informe sobre programa de espionaje de EE.UU.

Organizaciones critican informe sobre programa de espionaje de EE.UU.Washington, 3 jul .- Organizaciones estadounidenses defensoras de la privacidad criticaron un informe de una comisión independiente la cual dictaminó que el programa de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) resulta constitucional.

En un informe publicado este miércoles, la comisión Privacy and Civil Liberties Oversight Board respaldó el conjunto de programas de vigilancia por Internet de la NSA, los cuales provocaron un escándalo global tras ser revelados por el extécnico de la entidad Edward Snowden el año pasado.

El reporte de la junta, que incluye a un juez federal demócrata, dos expertos en privacidad y dos exfuncionarios republicanos del Departamento de Justicia, contrasta sin embargo con su informe de enero de 2014, cuando argumentó que husmear en registros de llamadas telefónicas nacionales era inconstitucional.

En virtud de una disposición conocida como Sección 702, añadida en 2008 a la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera de 1978, la NSA utiliza órdenes de la corte y accede a líneas de fibra óptica para acumular e investigar datos de extranjeros cuando sus correos electrónicos, chats, mensajes de texto y otras comunicaciones entran a Estados Unidos.

La Sección 702 tiene su origen en el Programa de Vigilancia de Terroristas, un esquema de recolección de datos establecido por el expresidente George W. Bush (2001-2009), puesto en marcha tras los ataques terroristas de 2001.

Este informe no ayuda en nada para frenar la vigilancia de la NSA, lamentó Marc Rotenberg, presidente del Electronic Privacy Information Center.

Para Kevin Bankston, de la New America Foundation, el documento avala el "inmiscuirse sin mandato en nuestras comunicaciones".

El informe representa hasta ahora el documento más detallado sobre el funcionamiento de los programas de espionaje revelados por Snowden.

Uno de estos programas de vigilancia, el conocido como Prism, faculta al Buró Federal de Investigaciones (FBI), en nombre de la NSA, a enviar a los proveedores de servicios en Internet la dirección de una persona susceptible de revelar informaciones vinculadas con el terrorismo, la seguridad nacional o la proliferación de armas de destrucción masiva.

En consecuencia, gigantes como Google, Facebook, Microsoft, Apple y casi todas las empresas tecnológicas importantes de Estados Unidos, son obligadas a entregar a las agencias de inteligencia todas las comunicaciones desde y hacia esa persona.

Desde que se dieron a conocer las revelaciones de Snowden en junio de 2013, activistas de derechos civiles han expresado su preocupación por la obtención de comunicaciones privadas de estadounidenses sin órdenes judiciales por la agencia de seguridad gubernamental.

Algunos han cuestionado cómo un programa de este tipo es legal en virtud de la constitución.

Aunque la administración del presidente Barack Obama ordenó una revisión y modificación de las prácticas de la controvertida agencia, activistas consideran cosméticos e insuficientes los pretendidos cambios.(PL)