Tratará Obama de sepultar funestos augurios en Maryland y Pensilvania

Tratará Obama de sepultar funestos augurios en Maryland y PensilvaniaWashington, 12 jun.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, viajará hoy a Baltimore (Maryland) y Filadelfia (Pensilvania), donde tratará de seguir recaudando dinero y de paso, tratar de sepultar los funestos primeros días de junio para su campaña por la reelección.

En lo que va de mes, el mandatario ha visto multiplicarse los malos augurios para su intención de mantenerse otros cuatro años en la Casa Blanca.

El departamento de Trabajo anunció recientemente que la tasa nacional de desempleo escaló al 8,2 %, y que solo se crearon 69 mil puestos el mes anterior, cuando la previsión era de 155 mil cupos, en momentos que Obama convierte el tema económico en bandera de sus intenciones reelectorales.

A esto se añade la noticia de que el virtual candidato presidencial Mitt Romney recaudó 76 millones de dólares, 16 millones más que "el expreso" del mandatario, quien hasta ahora se vanagloriaba de atraer las recaudaciones como un imán.

Otro balde de agua fría resultaron los comentarios del expresidente William Clinton, quien aplaudió los recortes de impuestos decretadas por el mandatario George W. Bush hace un lustro.

Aunque Clinton intentó corregir su error, su esfuerzo cayó en saco roto.

La semana pasada, las elecciones revocatorias del gobernador de Wisconsin, Scott Walker, terminaron con una victoria del republicano, lo que pudiera resultar un recordatorio para el equipo de la Casa Blanca de que camina sobre ascuas en el trayecto a las elecciones del 6 de noviembre.

Por si fuera poco, los republicanos en ambas cámaras del Congreso anunciaron investigaciones respecto a posibles fallos en materia de "seguridad nacional, después que el diario The New York Times revelara un listado supervisado por el jefe de Estado, en el cual decreta la muerte de sospechosos de terrorismo y ataques cibernéticos contra Irán.

Mientras Obama y su rival Romney continúan empatados respecto al apoyo de los posibles votantes, para la administración demócrata parece no escampar cuando la Corte Suprema de Justicia está próxima a emitir un fallo sobre la constitucionalidad o no de la Ley de Salud del presidente, de 2010.

Un voto en contra significaría un duro revés para Obama, quien vería seriamente comprometidas sus aspiraciones de un segundo mandato.

No obstante, nuevos nubarrones se asoman al horizonte demócrata.

La víspera, la Comisión de Supervisión y Reforma Gubernamental de la Cámara de Representantes, liderada por los republicanos, anunció que acusará de desacato al Fiscal General, Eric Holder, por negarse a entregar documentación relacionada con la controvertida Operación Rápido y Furioso.

Una acusación de este tipo aprobada por el Congreso, además de llevar a una acusación formal contra Holder ante el Tribunal Supremo, traería consecuencias políticas nefastas para la administración Obama. (Radio Cadena Agramonte).