Cuba en Guadalajara: ¿pronóstico con una bola de cristal?
La actuación de la delegación cubana en los XVI Juegos Panamericanos de Guadalajara, México, cumplió los pronósticos de mantener el histórico segundo lugar por países, con 58 medallas de oro. Antes de partir a tierras tapatías, los especialistas del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación vaticinaron una encarnizada lucha con Brasil, con las mayores posibilidades cubanas a partir del 24 de octubre, luego de 10 días de competencia.
Y así fue en la práctica, como si los pronósticos salieran de una “bola de cristal”, o mejor, de la siempre esperada excelente actuación de deportes como el atletismo y el boxeo.
Pero no fue “tan simple” como solemos escribir en un texto, por la calidad en ascenso de los rivales foráneos, con un gigante suramericano que presentó en Guadalajara una tropa de lujo, y unos anfitriones dispuestos a responder con medallas al entusiasmo de su público.
En este sentido, vale destacar la excelente actuación del judo femenino, toda vez que las discípulas de Ronaldo Veitía ganaron cinco preseas de oro, de esas que contaban doble, porque Brasil tenía en el certamen a sus estrellas mundiales del tatami.
A solo dos jornadas de la clausura de la justa, tras las competencias del jueves 27, los antillanos ocupaban el tercer puesto, con 96 medallas: 37 de oro, 26 de plata y 33 de bronce.
Los brasileños, con 110 metales (39-25-46) superaban hasta ese momento a la Isla Caribeña por 14 preseas áurea y albergaban esperanzas de apoderarse del puesto que ostenta Cuba desde hace exactamente 40 años, con excepción de la cita de La Habana 1991, cuando subió a lo más alto del medallero.
El vaticinio de la “bola cristal”, elaborado minuciosamente por expertos con especial profesionalidad, se cumplió y Cuba se apoderó del histórico segundo escaño panamericano un día después, de la mano de siete oros en el atletismo, cuatro en el boxeo, dos en el judo femenino y otras dos en el canotaje, aventajando a la nación sudamericana en la cantidad de títulos.
Finalmente, la delegación antillana, compuesta por 441 deportistas, se llevó a casa 136 metales (58 de oro, 35 de plata y 43 de bronce), en tanto Estados Unidos encabezó la tabla de medallas con 236 (92-79-65) y el tercer lugar correspondió a los brasileños, que lograron 140 coronas (47-35-58).
Los anfitriones ocuparon el cuarto lugar, con un acumulado de 132 (42-40-50), seguidos por Canadá (28-40-49=117) y Colombia (24-24-34=82).
Aunque se debe seguir trabajando en los puntos que fallaron, los deportistas cubanos, voluntariosos, entregados, corajudos… no defraudan a la Patria en el momento necesario. (Lourdes Ordeñana del Río, AIN)