Economía

Iniciativas que se aplauden

Iniciativas que se aplaudenSantiago de Cuba.- No podría criticarse a quienes años atrás llegaron a pensar que las frutas se habían extinguido de las benditas y fértiles montañas de esta oriental provincia, la mayor productora de Cuba en todas sus variedades.

Causas objetivas como la falta del transporte adecuado y subjetivas, que para nada estimulaban las cosechas, acopio, comercialización y ventas, se interponían en la gestión de traslado a las industrias procesadoras y a los mercados, reportándose graves pérdidas todos los años.

Eliminadas molestas trabas burocráticas como parte de los cambios que se van introduciendo para hacer más eficiente el modelo económico del país, alentados por el estado surgieron decenas de típicos kioscos que hoy adornan las carreteras de esta provincia colmados de estimadas y exóticas frutas.

Campesinos con fincas o parcelas aledañas a las principales vías integradas al Movimiento Cooperativo, con el deber de abonar al fisco los tributos correspondientes, ofertan aquí lo mejor de sus ecológicas producciones con llamativas gestiones de ventas, sujetas a proposiciones sin la presencia de intermediarios.

“Después que le entrego al estado lo que le he contratado, aquí vendo todo tipo de frutas y viandas, miel de abeja, maíz tierno y con la misma calidad de lo que se come en mi casa, porque al que engañes por ganar más, ese no vuelve a parar aquí”.

Me dijo Raúl Benítez a cargo de uno de los kioscos ubicados en la autopista entre San Luís y Palma Soriano, donde tiene la finca que primero fue de su abuelo y luego de su padre y que a su decir “es un tesoro”.

Afortunadamente la aplaudida iniciativa se ha extendido a la ciudad de Santiago de Cuba, a la cabecera de los restantes municipios y Consejos Populares con la apertura de pequeños mercados agropecuarios en los barrios, para acercar todas estas producciones a la población.

Iniciativas que se aplaudenMuchos de estos pequeños mercados o placitas, estuvieron por años cerrados y fueron arrendados a diferentes formas productivas, que se han encargado de repararlos y habilitarlos con aceptables surtidos, bajo la atenta mirada de la comunidad donde tienen su razón de ser.

Se agrega a todo lo anterior, la organización de los vendedores ambulantes uniformados con manuables carretillas, tras las que van pregonando sus mercancías hasta la misma puerta de las viviendas santiagueras, en el diario recorrer por las empinadas calles de esta ciudad fundada en 1515.

Para hacer realidad la idea, varias empresas recibieron la indicación de construir carretillas de mano y de tracción animal, adquiridas por la Granja Urbana Santiago y vendidas a los particulares con facilidades de pago.

Aunque en este sentido quedan muchas reservas por explotar y eficiencia por ganar, se ha ido logrando orden y disciplina con mejor imagen de nuestras carreteras y ciudades, consiguiéndose también que cientos de toneladas de frutas que antes se perdían, encuentren amparo en grandes y pequeñas industrias del territorio encargadas de convertirlas en pulpas, mermeladas, y jugos, para beneplácito de los habitantes de varias provincias orientales.

(Tomado de Radio Rebelde)