Industria siderúrgica cubana resiste efectos de crisis económica
La Habana, 21 jul .- La industria siderúrgica cubana ha resistido ante el desplome de los mercados del acero por la reducción de la producción por los elevados precios de las materias primas, y la contracción de la demanda mundial de los metales.
Afectada también por los altos y bajos del petróleo, la fabricación de acero y sus derivados cubanos no están exentos de las fluctuaciones en las cotizaciones internacionales, lo cual ha obligado a la constante reducción de los costos y uso racional de los recursos, afirmó el viceministro de la Industria Siderúrgica, Guillermo García.
En la inauguración del XIV Congreso Internacional Metalúrgico, el funcionario explicó que en el período de un año los mercados de referencia de exportación como el de Turquía, la Comunidad de Estados Independientes y Latinoamérica redujeron el precio de la palanquilla de acero de mil 250 dólares a un mínimo de 400 y 500 dólares la tonelada de barras corrugadas.
Todo ello afectó la cadena productiva y comercialización con serias restricciones de las capacidades fabriles y cierre de algunas plantas a nivel mundial, precisó.
García afirmó que a pesar de ese adverso panorama la siderurgia cubana obtuvo positivos resultados en 2008 en sus dos empresas: Antillana de Acero y Acinox Tunas, las cuales superaron las exportaciones del 2007, con un incremento promedio del 30 por ciento de sus ingresos en el Caribe y Centroamérica.
Aclaró que el cierre de este año estará en dependencia de la situación internacional, impulsada por la producción y demanda de acero en China, y del comportamiento de la economía global.
Precisó que a pesar de esa recuperación, que no debe ser estable hasta después del segundo semestre del 2010, Cuba debe reducir el costo de sus producciones metalúrgicas y trabajar por un mayor rigor en el uso de los portadores energéticos, además de buscar soluciones para disponer de mayores volúmenes de chatarra para las acerías, enfatizó.
Además de exportar y entregar importantes cantidades de acero a la economía nacional y los programas priorizados, la industria siderúrgica cubana entregó más de 70 millones de dólares para la construcción de viviendas, programas energéticos, defensa del país, la industria azucarera y agroindustria azucarera.
A nivel mundial la producción y comercialización de acero y sus derivados disminuyó un 50 por ciento desde julio del pasado año por los efectos de la crisis económica, con reducciones marcadas en Brasil, Argentina, México y Chile, así como en toda Centroamérica.(PL)
