internacionales

Ministro de Gobierno de Bolivia candidato por el MAS a la presidencia

La Paz, 16 may.- El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, fue elegido hoy como candidato a la Presidencia de Bolivia por el Movimiento al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP).

Del Castillo fue presentado la noche de este viernes sorpresivamente, y más sorpresa causó que le acompañará para aspirar a la vicepresidencia el dirigente campesino Milán Berna, pues la víspera el portavoz del Pacto de Unidad Guery García declaró en el canal estatal Bolivia Tv que la diputada Daysi Choque había resultado elegida para disputar ese cargo con 40 votos.

Al agradecer su elección, del Castillo enfatizó en que el país “necesita orden”, expresión que hizo pensar en el desenlace violento de la marcha protagonizada este viernes por miles de seguidores del exmandatario Evo Morales en las proximidades del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

El propósito de los marchistas que llegaron este viernes a La Paz era exigir la inscripción como candidato presidencial al primer exmandatario indígena del Estado Plurinacional con vista a las elecciones generales de agosto próximo.

Sin embargo, el fuerte dispositivo policial que resguardaba esa sede recurrió al empleo de gases para dispersar a los movilizados, e incluso en la acera de la calle Sánchez Lima, en la cual radica el TSE, eran visibles huellas de sangre.

Al mediar a propósito de esta confrontación, la Defensoría del Pueblo demandó a la Policía racionalizar el uso de la fuerza y de agentes químicos en cumplimiento de estándares internacionales de legalidad, proporcionalidad y necesidad.

En un intento de ingresar hasta las inmediaciones del TSE y la contigua plaza Abaroa por medio de la fuerza, la Policía Boliviana hizo uso de gases lacrimógenos.

Jefes de este cuerpo del orden argumentaron que tomaron esa medida porque los marchistas arrojaron piedras, petardos e incluso un artefacto explosivo.

La Defensoría, en tanto, recordó que, según sus atribuciones, la institución realizó la segunda jornada de movilización y de acuerdo con el reporte preliminar, la marcha que bajó desde Cruce Ventilla, El Alto, hasta el centro de La Paz no presentó problemas, salvo algunos incidentes.

“En el intento de ingreso de la marcha hacia inmediaciones de plaza Abaroa, se evidenció que efectivos policiales hicieron uso indiscriminado de la fuerza, así como uso de agentes químicos para evitar el avance de los movilizados hacia el Tribunal Supremo Electoral”, observó.

Señaló que producto de esa conflictividad cinco personas resultaron aprehendidas, y varios funcionarios policiales resultaron heridos, además de un periodista de Cadena A.

La Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional (ACPI), por su parte, condenó en un comunicado las agresiones y el uso desmedido de la fuerza por parte de la Policía hacia tres de sus asociados.

“(…) Un fotoperiodista y un videógrafo que trabajan para una agencia internacional de noticias recibieron disparos de balines de goma activados por policías desde corta distancia, a pesar de que ambos portaban sus acreditaciones, cascos y chalecos de seguridad que los identificaban como corresponsales (…)”, informó la ACPI.

Precisó que el fotoperiodista recibió el impacto de un proyectil en el pecho que fue aplacado por su equipo de seguridad, y un segundo disparo le lesionó en un brazo.

Indicó que el videógrafo también recibió un impacto de balín en el pecho, pero que no le causó heridas porque contaba con la indumentaria respectiva.

Añadió que un tercer incidente se produjo en la misma locación cuando un policía roció gas pimienta por un tiempo prolongado en el rostro del colaborador de una agencia de noticias asiática, cuando este registraba las imágenes del enfrentamiento.

“(…) Esto dejó aturdido al reportero que quedó descompensado por varios minutos y fue auxiliado por un grupo de colegas”, señala el texto.

“(…) Recordamos a las autoridades, a los actores políticos y sectores sociales que los periodistas no tomamos partido por ninguna de las partes involucradas en los conflictos”, concluye el escrito. (Tomado de Prensa Latina)