Al surGente de mi Pueblo

Colaboradores de Proyecto Internacional cultivan alimentos en comunidad santacruceña de La Playa

Santa Cruz del Sur, 8 jul.- Carlo Alberto Fonseca Naranjo (El Jaco) y Osmani Rodríguez Facundo son dos colaboradores del Proyecto Internacional Mi Costa. Estos residentes de la comunidad de La Playa de la ciudad cabecera santacruceña, además de ser fieles veladores del cuidado del medio ambiente costero, han desafiado el salitre, el calor y los mosquitos para dedicarse a la siembra de alimentos.

El primero de ellos aprovechó espacio donde residieron damnificados del huracán Paloma.

“Tengo frijoles, plátanos,  guayaba, icaco, anón, ciruela, guanábana y mangos. Los canteros los voy a acondicionar mejor para cuando llueva plantar cebolla, habichuela, frijol y pepino”, indicó.

Con un amigo que tiene carretón de tracción animal Carlo Alberto se ha apoyado para transportar considerable cantidad de estiércol de ganado vacuno.

“Un fertilizante muy bueno incluso para el boniato que en breve voy a cosechar. Todo lo que siembro se da bien”, afirmó.

Un fuerte viento en días recientes le derribó la única mata de coco. “Sembraré otra”, manifestó decidido.

Aunque el patio de Rodríguez Facundo es de menor tamaño, a cada palmo de tierra le da utilidad.

“La buena mano que al parecer tengo me facilita prosperen las matas de aguacate, limón, plátanos, fruta bomba, guanábana, guayaba y coco. Ya hice prueba con la siembra malanga. Además crío conejos”, planteó.

No distante de su hogar este oficial de la Unidad de Tropas Guardafronteras santacruceña tiene media hectárea de arroz cultivada. “Aquí vivían personas antes del Paloma. He tenido que sacar mucho escombro, pero me ha dado resultado. Cuando coseche haré una donación al Círculo Infantil Luis Aldana Palomino. Es un compromiso que me hice y lo voy a cumplir”, manifestó.

En la parte alta de esa área este residente de la comunidad  santacruceña de La Playa va a expandirse con la plantación de calabaza, pepino, tomate y lechuga. A su vez aprovecha la madera de especies invasoras como la rosquita, el ipil ipil y la almendra para hacer carbón destinado a la cocción de los alimentos en su vivienda.”No le permito a nadie que corte un mangle con ese fin, es un barrera natural a cuidar”, fundamentó Osmani.