Cultura

2009: un año fructífero para la cultura cubana

La Habana, 7 ene .- El año recién finalizado estuvo marcado por el 50 aniversario de Casa de las Américas y del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), y una fiesta multitudinaria como el concierto Paz sin fronteras.

Casa e ICAIC, dos instituciones de hondo arraigo, con una proyección latinoamericana e integradora, de vasos comunicantes.

La isla vibró con la presencia de personalidades de diversas latitudes que protagonizaron jornadas memorables y reafirmaron su voluntad de un intercambio recíproco, en un abrazo solidario.

Escritores, artistas plásticos, bailarines, músicos, cineastas y artesanos de la isla enriquecieron el panorama con presentaciones, coloquios, homenajes y festivales que convocaron a un público masivo, abierto al disfrute de un hecho cultural del que forma parte.

A principios de 2009, Casa de las Américas comenzó a festejar en grande su 50 cumpleaños con la apertura de la primera de varias exposiciones dedicadas al arte cinético y su tradicional Premio Literario en el que concursaron 600 originales.

Una Casa tomada por los jóvenes que impusieron su sello a una institución en permanente movimiento, con un pie siempre puesto en el futuro y un empeño renovador.

A la celebración se unieron personalidades del área. como el presidente dominicano Leonel Fernández, el artista puertorriqueño Antonio Martorell, el escritor colombiano William Ospina y la pintora chilena Matilde Pérez, quien inauguró una muestra personal a cuya apertura asistió la mandataria de ese país, suramericano, Michelle Bachelet.

Pocos días después, Bachelet y el presidente cubano, Raúl Castro, encabezarían la inauguración de la Feria Internacional del Libro dedicada a Chile, a la poeta y ensayista cubana Fina García Marruz y a su coterráneo, el historiador e investigador Jorge Ibarra.

En la fiesta literaria, que se extendió a toda la isla, participaron más de 700 figuras de 43 países, entre ellas el mexicano Paco Ignacio Taibo II, los chilenos Pedro Lemebel, Poli Délano y Carmen Berenguer y el noruego Jostein Gaarder.

Marzo y abril fueron meses dedicados a las artes plásticas con la décima edición de la Bienal de La Habana que, bajo el lema de Integración y resistencia en la era global, convirtió a la capital en una amplia galería en la que tuvieron cabida las más nuevas tendencias de varias latitudes.

A la cita acudieron unos 300 artistas de 50 países como el chino Cai Guo-Qiang y la japonesa Satomu Matoba.

El cine también estuvo de júbilo por sus cinco décadas celebradas con el estreno de la cinta Ciudad en rojo, de la realizadora Rebeca Chávez. En la gala, a la que asistió el presidente Raúl Castro, fueron distinguidos los fundadores y también otros creadores que acompañaron al ICAIC durante estos años.

Junto a los realizadores veteranos, los noveles con una producción propia, ilustrativa de una mirada nueva, recogida en una muestra fílmica de su trabajo proyectada en la capital y en el interior de la isla.

Un mes después, el 28 de abril, Casa de las Américas volvió a ser noticia con la ceremonia de su aniversario, a la que asistió el presidente cubano, quien condecoró al poeta y ensayista Roberto Fernández Retamar, presidente de Casa, con la Orden José Martí, la más alta distinción que otorga el Estado en la isla.

Coincidiendo con esos festejos, Retamar recibió el Premio ALBA de las Letras, un honor que compartió con el cineasta boliviano Jorge Sanjinés.

Como cada año, en mayo reinó la música con la feria Cubadisco 2009, dedicada esta vez a Puerto Rico y al público infantil. A la cita discográfica asistieron los boricuas Andy Montañez, Edwin Colón, Roy Brown y Danny Rivera.

Cubadisco cedió espacio a la literatura, en junio, con el 14 Festival de Poesía de La Habana, que homenajeó a los países árabes. En ese mes también fue noticia el concierto de la banda mexicana Café Tacvba en la Tribuna Antimperialista José Martí, como parte de la gira para festejar sus dos décadas de vida.

Durante los meses veraniegos, los cubanos estuvieron de plácemes con la presencia, por primera vez, de una de las compañías danzarias más prestigiosas del mundo, el Royal Ballet de Londres, que entusiasmó al público con piezas como Manon, Un mes en el campo y Romeo y Julieta. Fue un encuentro fraterno. El Royal y el Ballet Nacional de Cuba unidos en la sala García Lorca, del Gran Teatro de La Habana, en un tributo de la agrupación londinense a la prima ballerina assoluta Alicia Alonso. Actuar en Cuba fue un altísimo honor, expresó la directora de la compañía, Mónica Mason.

A finales de julio, llegó a la isla el actor puertorriqueño Benicio del Toro para recibir el Premio de Cine Tomás Gutiérrez Alea, de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. Vino acompañado por varios colegas norteamericanos del relieve de James Caan, Robert Duvall y Bill Murray.

Las artes escénicas desplegaron sus galas en el teatro la danza, el circo, el humor y el arte lírico. Según datos oficiales, más de 120 mil espectadores acudieron a las salas y disfrutaron de unos 130 estrenos.

El teatro se volcó en un festival internacional en el que participaron agrupaciones de Chile, Bolivia, México, Estados Unidos, Alemania, Ecuador, Argentina, Turquía, Italia, y Dinamarca, entre otros.

Octubre tuvo un centro de particular esplendor, el Día de la Cultura Cubana, en cuyas vísperas todas las instituciones presentaron lo mejor del trabajo del año realizado en todo el país.

La música devino una de las manifestaciones más veneradas en 2009 y atrajo a destacadas figuras internacionales.

Un ejemplo fue la segunda edición de Paz sin fronteras, organizada por el compositor y cantante colombiano Juanes, en la que intervinieron otros 13 artistas, entre ellos la puertorriqueña Olga Tañón y los españoles Miguel Bosé, Luis Eduardo Aute y Victor Manuel.

Transmitido en directo por varias cadenas televisivas internacionales, el espectáculo tuvo una amplia repercusión mundial y se convirtió en el tercero más importante de la historia. Cuba estuvo presente todo el día, comentaron periodistas de distintos medios y publicaciones extranjeras. Los ecos de Paz sin fronteras aun perduran

Otros momentos destacados fueron las dos giras de la Orquesta Sinfónica de Venezuela por la isla, el concierto del hispanofrancés Manu Chao, quien rindió homenaje al guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara, y el espectáculo Escuela contra huracanes, que aunó a artistas cubanos y europeos.

Este último, organizado por iniciativa del cantante cubano Raúl Paz, contó con el respaldo del español Antonio Carmona, ex líder del grupo Ketama, y los franceses Florent Pagny, Yannick Noah y MC Soolar.

La música cubana brilló con la cantante Omara Portuondo y el jazzista y compositor Chucho Valdés, quienes merecieron sendos Grammy latinos. Portuondo triunfó con su CD Gracias y Valdés con Juntos para siempre, grabado con su padre Bebo.

Ambos volvieron a acaparar titulares con su nominación a la versión norteamericana del Grammy 2010.

En diciembre el séptimo arte resplandeció con el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, a cuyo llamado acudieron artistas como los argentinos Fito Páez y León Gieco, y los estadounidenses Robert Kraft y Gary Lucas. La cita, a la que son fieles los cubanos desde hace más de tres décadas, reunió a más de un cuarto de millón de espectadores.

De forma paralela sesionó la Feria Internacional de Artesanía 2009.

El año cerró con otros espectáculos musicales de gran alcance. El primero de ellos, el 20 de diciembre, cuando más de 250 mil habaneros de todas las edades disfrutaron de la actuación de la veterana banda norteamericana Kool and the gang, en la Tribuna Antiimperialista José Martí, en las inmediaciones del malecón copado por una masa humana.

Lo sucedieron los bailables en espacios al aire libre, para saludar el advenimiento de un nuevo año y el 51 de la Revolución triunfante en 1959.

A punto de finalizar 2009 llegaron los premios. El de Literatura otorgado al ensayista e investigador Ambrosio Fornet, el de Artes Plásticas al pintor Nelson Domínguez; el de Teatro al director y actor Carlos Pérez Peña; el de Danza al coreógrafo Isidro Rolando y el de Enseñanza Artística a la coreógrafa Lorna Burdsall.

El cine distinguió a uno de sus pilares imprescindibles, el compositor, guitarrista y director de orquesta Leo Brouwer, fundador del Grupo de Experimentación Sonora del ICAIC, agasajado, además, por su 70 cumpleaños, una reverencia que se multiplicó en varios países foráneos.

La cultura cubana se mantuvo en el centro de interés, tanto en la isla como en diferenets partes del mundo, son el sello distintivo de la idiosincrasia y la herencia africana y española en cuyas raíces se asienta.

El 2009 fue un año intenso e histórico para el acervo espiritual de la isla, con los cubanos como partícipes y protagonistas de una cultura viva, fecunda y actuante. (PL)