Ecuador dispuesto a diálogo con Colombia, pero sin olvidar Angostura
Quito, 22 sep .- El Canciller ecuatoriano, Fander Falconí, expresó la disposición de avanzar en el diálogo con su homólogo colombiano, Jaime Bermúdez, previsto para hoy en Naciones Unidas, pero sin olvidar las demandas de su país sobre el bombardeo a Angostura.
En declaraciones al programa El poder de la Palabra, del diario digital Ecuadorinmediato, Falconí pidió cautela sobre los posibles resultados del inicio del dialogo tendiente a restablecer relaciones diplomáticas entre Ecuador y Colombia, rotas a raíz del bombardeo del ejército colombiano el 1 de marzo de 2008.
La delegación ecuatoriana que viajó a Nueva York para participar en la Asamblea General de Naciones Unidas está conformada además por el ministro de Seguridad Interna y Externa, Miguel Carvajal, y el asesor jurídico de la Cancillería, Marco Albuja.
Uno de los puntos fundamentales de las demandas de Ecuador ha sido satisfecho por el lado colombiano, adelantó Falconí, al dejar de lado el gobierno de Bogotá la tesis de la extraterritorialidad, es decir la posibilidad de intervenir en terceros países por motivos de su seguridad.
En ese sentido analizó con optimismo las declaraciones del presidente Álvaro Uribe en la Cumbre de Bariloche, Argentina, de resolver cualquier litigio por los canales diplomáticos, y también lo ocurrido en la Reunión Extraordinaria de ministros de Defensa y Relaciones Exteriores, en Quito.
En esa última ocasión, precisó, la Cancillería y ministerio de Defensa colombianos expresaron muy claro que dejaban de lado esta tesis y el propio canciller Bermúdez, en declaraciones recogidas por la prensa, manifestó que nunca más habrá algo parecido a lo de Angostura.
Esas son declaraciones positivas, pero se deben tener garantías de que se mantendrá ese tipo de trayectoria en el futuro y eso tiene que ser consolidado en términos formales, enfatizó el jefe de la diplomacia ecuatoriana.
El gobierno de Quito planteó cinco requerimientos para restablecer relaciones diplomáticas, enumeró Falconí. En primer lugar, que el gobierno de Bogotá termine con la campaña de vincular a su gobierno y autoridades con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
También, que se comprometa con la presencia efectiva de su fuerza pública en la zona fronteriza; viabilice la entrega de la información solicitada sobre la incursión de 1 de marzo; haga efectiva la entrega de información sobre las computadoras encontradas en Angostura; y contribuya con sus refugiados en territorio ecuatoriano. (PL)