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Planta exótica amenaza ciénagas del occidente de Cuba

Matanzas, 14 may. -La planta llamada Melaleuca o Cayeput constituye reto para los científicos cubanos debido a la progresiva expansión de las poblaciones de esa especie exótica invasora, que amenaza ecosistemas de ciénagas situadas al norte y sur de la occidental provincia de Matanzas.

Introducido en la Isla durante el siglo XX con fines ornamentales, el arbusto oriundo de Oceanía afecta en la actualidad grandes extensiones de los humedales, provoca el desplazamiento de la vegetación nativa y afecta la calidad del suelo.
   
Nelvis Gómez, investigadora del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), refirió a la AIN que los efectos de la Melaleuca representan un verdadero peligro para la biodiversidad en la Ciénaga de Zapata, mayor humedal del Caribe insular, y en la Ciénaga de Majaguillar, situada al norte.
   
La también coordinadora en Matanzas de un proyecto internacional para prevención, control y manejo de especies invasoras en ecosistemas vulnerables de Cuba, apuntó que la amplia dispersión de las abundantes semillas de la planta, por medio del agua, dificulta los esfuerzos para su erradicación.
   
Ni siquiera el fuego logra afectar a las simientes, las cuales pueden permanecer largo tiempo en estado latente para luego germinar, aseguró la experta involucrada en la iniciativa que cuenta con financiamiento del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
   
Lázaro Cotayo, especialista del Parque Nacional Ciénaga de Zapata, comentó que la tala del Cayeput incluso en lugares de difícil acceso, se materializa aún en resultados discretos, aunque contribuye a mermar sus poblaciones cuya transpiración intensa provoca la desecación del terreno.
   
Según Nelvis, de forma paralela a las medidas para detener el avance de la Melaleuca, se aprovecha el aceite esencial extraído de sus hojas y ramas, con múltiples usos medicinales como expectorante, estimulante, antiséptico urinario y antiparasitario de uso externo, entre otras aplicaciones.
   
Habitantes de 28 comunidades humanas comparten espacio con una biota de alto endemismo representada en animales como el cocodrilo cubano en la Ciénaga de Zapata, y en la de Majaguillar se reproduce la única especie de Magnolia que crece a nivel del mar en las ínsulas caribeñas.
   
Frenar el desarrollo de unos 30 organismos invasores como clarias, peces león, la planta acuática Myriophyllum y otros perjudiciales para la flora y fauna autóctonas de la Isla, ocupa a científicos en la provincia de Matanzas, donde el 78 por ciento de su territorio está incluido en una veintena de áreas protegidas.(AIN)