Cultura

Repentismo: La controversia del siglo XX

Como hace poco el Repentismo fue declarado Patrimonio Cultural de Cuba, es bueno para los amantes del género recordar un hecho que acabó por conocerse como la  Controversia del Siglo XX.

Hace exactamente 58 años dos grandes de la música campesina, Angelito Valiente y el Indio Naborí, se liaron por dos ocasiones en una tremenda pelea, nada más y nada menos que ante un numeroso público calculado en unos 10 mil espectadores.
   
Todo ocurrió en los meses de junio y agosto del año 1955,  cuando los dos improvisadores más famosos de la radio entonces, concertaron un duelo a instancias de los radioyentes, quienes solicitaron, sacar de la cabina de la emisora CMQ y ver frente a frente, a los dos contrincantes, en un mano a mano que haría historia.
   
Fue así como el 15 de junio de 1955 en San Antonio de Los Baños, La Habana, y ante la presencia de dos mil personas asistentes al Teatro del Casino Español de aquella localidad, tuvo lugar la primera parte de la controversia, con un jurado, y tres temas seleccionados por el público: El Amor, La Muerte y La Libertad.
   
Quedó tabla el encuentro, quizás por la indiscutible calidad de los contrincantes, o porque el propio público aclamaba a ambos,  quizás también por lo inaudito del hecho ante el cual el jurado se lavó las manos y selló el triunfo sin perdedores, ni ganadores, aunque sí ganaba la historia del repentismo cubano, y los propios poetas conquistaban aún más el corazón de sus seguidores.
   
Dos meses después y en una revancha sin cabida para un local cerrado, debió emplearse el mismísimo estadio de Campo Armada, del reparto Lucero en La Habana, donde tuvo lugar el segundo choque y final de la controversia más concurrida y famosa del siglo XX.
   
Aseguran investigadores y literatos reconocidos como Maximiliano Trapero y Virgilio López Lemus, respectivamente, que aún no se rompe el récord de asistencia a un evento de tal naturaleza, pues hasta entonces nunca se ha visto tal poder de convocatoria de la poesía.
   
En esa última  polémica- efectuada un 28 de agosto de 1955-, se cantó a dos nuevos temas: El Campesino y La Esperanza.   
   
Cada una de las 10 estrofas sobre los cinco temas, improvisadas por los poetas, fueron recogidas en taquigrafía y publicadas en un diminuto volumen denominado Décimas para la Historia, pues realmente hicieron historia aquellos versos.(AIN)