Habanastation con muchos Mayito y Carlos en Camagüey

Camagüey, 28 oct. – Arián y Ricardo son de esos niños que Ian Padrón, director de la gustada película cubana Habanastation, estrenada recientemente, quiso retratar con los personajes protagónicos de Mayito y Carlos.

Viven en esta ciudad, en un barrio llamado La Belén, de humildes calles de tierra, adonde llegaron ese cineasta y la actriz Miriam Socarrás a presentar el filme, como parte de las actividades de extensión comunitaria de la XXI muestra audiovisual El Almacén de la Imagen.
   
Ricardo Olivera, con 12 años, aseguró que allí se comparte todo como en La Tinta, enclave imaginario donde suceden los hechos del largometraje, desde el equipo de juegos digitales llamado Nintendo, pariente cercano del Play Station que inspiró a Padrón, hasta las bolas, los papalotes, las chivichanas.
   
Incluso, existen tres grupos de amigos con preferencias: Los Serrano, Los Gatos Salvajes y Los Leones de La Belén, comentó Arián García con ojos pícaros, aunque no para pelear o enemistarse, sino para organizar los partidos de fútbol, de pelota o los juegos a “ladrones y policías”.
   
Ambos esperaban ansiosos la llegada de Padrón y la proyección de la cinta, que querían ver por tercera o cuarta vez, ya que dijeron sentirse profundamente identificados con la humildad de Carlos y la bondad de Mayito.
   
Para el realizador, el encuentro con los niños de La Belén, tan parecidos a los suyos de Habanastation, resultó una experiencia única y anhelada por él, debido a que en la temporada de estreno se encontraba en el festival de Traverse City, Michigan, Estados Unidos, donde obtuvieron premios.
   
En conversación con la prensa, Padrón comentó que esta presentación comunitaria en Camagüey es la primera realizada fuera de La Habana, y manifestó su interés por extender la iniciativa a otros lugares del territorio nacional, más allá del ámbito de las salas de cine.
   
Como Ricardo y Arián, otros niños camagüeyanos disfrutarán hoy de la compañía de los traviesos Mayito y Carlos de Habanastation, gracias a la magia del cine y a las experiencias de su director, esta vez en la barriada de Florat, en la periferia de esta ciudad.(AIN)