Capturan camarón Tigre en plataforma santacruceña

Capturan camarón Tigre en plataforma santacruceñaSanta Cruz del Sur, 12 abr.- En la zona de cayo Gitano, del archipiélago Jardines de la Reina, donde se enmarca la cuadrícula 128 apareció un crustáceo de inusual tamaño, dejando asombrada a la tripulación del ferrocemento 30, integrante de la flota del Combinado Pesquero Industrial Algérico Lara Correa, en este territorio.

Luis Marín Bejerano tiene más de 20 años dedicados a la captura del camarón rosado, habitante de esta plataforma marina. “Ocurrió estando hace unos días cerca de Mal Abrigo, un cayo nombrado así por los pescadores, pues por donde quiera le entra el viento…”

Capturan camarón Tigre en plataforma santacruceñaEn una de las últimas noches de la campaña, la jornada transcurría como de costumbre y estos experimentados hombres de mar habían hecho ya dos lances. La brisa envolvente los beneficiaba. “Hicimos  el tercer lance en una zona donde hay aproximadamente de 10 a 12 brazas de agua, al levar los chinchorros comenzamos a dejar los 40 kilogramos al descubierto para nevarlos…El primero en ver esa cosa enorme fue el marinero Francisco Vega, que se asustó y dio un grito muy fuerte”.

Sabíamos que era un camarón, pero diferente. Nadie de la tripulación conocía la especie del ejemplar, “saltaba mucho, metido entre el resto de los camarones, imaginamos que podía tratarse del Tigre, otros compañeros de uno de nuestros barcos había cogido uno, pero de menor talla.

Pocas horas después el ferrocemento 30 regresaba a puerto. El animal estaba congelado como los demás. “Cuando lo enseñamos hubo quien lo pidió para comérselo, pero ¡nada de eso! Lo he guardado en el refrigerador de la casa con dos fines, para ser publicado como curiosidad y luego entregarlo a los biólogos del Combinado Pesquero santacruceño, ellos desean hacer algunas investigaciones”.

El Tigre capturado mide 34 centímetros de largo y pesa 270 gramos. “Mire estos rosados que puse a su lado, sólo alcanzan entre 100 y 120 gramos nada más. ¡Qué diferencia! Y es una hembra, mire los genitales”.

El penaeus monodon, nombre científico del camarón Tigre, es oriundo de Asia, por lo que su presencia en el mar Caribe puede ser una amenaza para las especies autóctonas del ecosistema, que deberán competir con su nuevo compañero, contienda en la que los locales, si se juzga la talla, llevan todas las de perder.

La voz de la experiencia

Capturan camarón Tigre en plataforma santacruceña“Cuarenta años de trabajo no son dos días, fíjese si ha llovido”. A Roberto Domínguez Pérez puede decirse, en forma jocosa, le han salido escamas en la actividad pesquera. Comenzó en la Columna Juvenil del Mar. “Pescamos durante 12 meses en la parte de Tampa, perteneciente a La Florida, donde se capturaba la cherna, el pargo y el aguají, en del velero Sergio Jerez”.

Al incorporase a la empresa Algérico Lara Correa, de estos predios, se enrola en un barco camaronero. “En el año 1982 voy hacia Mozambique en misión de trabajo por  13 meses. Formé parte de la tripulación de un mercante donde se pescaba y procesaba pescado y camarón Tigre, de mediano y gran tamaño. Le digo más, hice campañas en varios barcos de ese tipo, para mejorar sus artes de pesca”.

“La pesca de ese crustáceo la hacíamos de día y de noche. Salíamos por un término de 30 días. No se me olvida que la capacidad de esas naves era de 22 toneladas, y en el menor tiempo retornábamos a entregar toda esa producción para la exportación. En cada lance, cuya duración era de cinco horas, se cogían de 500 a 600 kilos de ese tipo de camarón, en medio de un oleaje terrible”.

Reconoció enseguida al animal tras serle llevado por el propio Marín Bejerano. “Lo puse en mi brazo, resaltaban las rayas en el caparazón y los colores negro y amarillo, no había dudas, era un Tigre. Siempre  me he hecho esta pregunta:  ¿por qué  no se experimenta en criaderos la crianza de este marisco? En el mercado mundial es valioso. Vaya usted a saber, y tenemos suerte que se multiplique por aquí”, comenta Domínguez Pérez, ahora patrón de una embarcación procesadora de Pepino de mar.

El camarón forastero ha dado pie a numerosas conjeturas que serán investigadas con todo el rigor científico por biólogos marinos y veterinarios de la localidad, pues es una especie invasora que pone en riesgo a los crustáceos nativos, pues también es probable que traiga virus incluidos.

¿Será este un fenómeno aislado o a lo mejor decidió mudarse con el pez león? Parece que es esto último porque ya hay reportes de capturas en aguas colombianas y venezolanas.

Santiago SantaCruz
Cortesía para Radio Santa Cruz