Egipto inicia reforma constitucional pensando en próximas elecciones
El Cairo, 17 feb. – Un panel de jueces y expertos legales comenzó a enmendar la Constitución de Egipto enfocado en artículos que permitan una amplia participación en las próximas elecciones generales, las cuales algunos partidos opositores prefieren retrasar.
Luego de reunirse el martes con el jefe de la junta militar que gobierna el país, mariscal de campo Mohamed Hussein Tantawi, los magistrados recibieron la encomienda de revisar y modificar la Carta Magna en el plazo de 10 días, a partir de ahora.
El equipo de expertos lo encabeza el juez retirado Tareq Al-Bishry, una figura de renombre en el ámbito jurídico y considerado un islamista de tendencia moderada, quien deberá priorizar el texto corregido para que sea sometido a referendo en un lapso de dos meses.
Según explicó el integrante del panel Sobhi Saleh, la tarea principal ahora es asegurar la libertad de los partidos políticos con vistas a los comicios parlamentarios y presidenciales fijados, en principio, para dentro de seis meses.
Luego de la transición a la vida democrática y de elegir un Legislativo, las distintas fuerzas políticas y sociales podrán unirse y trabajar en función de redactar una nueva Carta Magna, opinó Saleh a medios periodísticos en esta capital.
Al-Bishry, por su lado, subrayó que el compromiso inmediato es corregir los artículos que conferían un monopolio del poder al presidente Hosni Mubarak, quien se vio forzado a renunciar el 11 de febrero luego de 18 días de multitudinarias protestas populares.
En ese sentido, los acápites a modificar ya son el 76, 77, 88, 93 y 189, mientras el 179 será eliminado, según explicó el panel formado por magistrados, profesores de Derecho y abogados.
"Vamos a revisar las cláusulas, términos y condiciones relacionadas con los artículos constitucionales que tienen que ver con las elecciones parlamentarias y presidenciales", acotó Atef El-Banna, un profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de El Cairo.
El comité de expertos se reunirá de forma periódica para discutir temas específicos sobre cómo esos artículos serán enmendados, indicó El-Banna, al recordar que el acápite 77 permitía a Mubarak reelegirse de forma indefinida, y ahora se piensa fijar un máximo de dos mandatos.
Por su parte, el 93 impedía que cualquier instancia ajena a la cámara baja del parlamento -que estaba dominada por el gobernante Partido Nacional Democrático- dictaminara sobre la invalidación de los resultados en las elecciones legislativas.
La jefatura del CSFA decidió igualmente eliminar el artículo 179 de la Carta Magna que permitía al jefe de Estado remitir un supuesto caso de terror a cualquier órgano judicial, lo cual le daba el derecho de utilizar para ello cortes militares.
Entretanto, la ilegalizada Hermandad Musulmana (HM), que avaló a Saleh como miembro del panel de reforma constitucional, anunció su intención de estructurarse como partido político, aunque negó tener pretensiones presidenciales y sólo disputará asientos en el parlamento.
El movimiento fundamentalista fue fundado en 1928 y proscripto desde 1954, pero tiene arraigo en barrios generalmente pobres por sus distintos proyectos sociales, además de que ganó el 20 por ciento de los escaños parlamentarios en las elecciones de 2005.
Mientras la HM se muestra dispuesta a participar en los comicios que organizará el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (CSFA), si finalmente es legalizada, la oposición laica se muestra dividida en lo relativo a la conveniencia de efectuar los comicios en seis meses.
Activistas que se manifestaron contra Mubarak y a favor de la democracia buscan establecer un partido político que podría asumir el nombre de 25 de Enero, en alusión al día de inicio de las protestas callejeras, para eventualmente participar en la venidera votación.
Sin embargo, para el partido Wasat (Centro) las parlamentarias "necesitan de más tiempo" de forma que todas las formaciones tengan oportunidad de "reformarse a símismas y reconstruirse", según su dirigente Abou Elela Mady.
Otros grupos, si bien saludaron que se convoque a comicios generales dentro de seis meses, mostraron preocupación por el escaso tiempo para organizar una campaña efectiva, dado que el régimen de Mubarak propició su desarticulación, amén de las propias divisiones internas.(PL)