Si es necesario se volverá a romper el corojo

Si es necesario se volverá a romper el corojo Como una de las páginas más gloriosas de la historia de Cuba se inscribió el Grito de Baire, con el cual reinició en 1895 la gesta independentista de 1868. Llamado de rebeldía que resume las ansías de soberanía nacional que acompañan al cubano de ayer, de hoy y de siempre.

"¡El 24 de febrero se rompe el corojo!", exclamó el Lugarteniente General Antonio Maceo, en franca alusión al deseo y la necesidad impostergable de conseguir la libertad por las armas.
Ese día volvieron las cargas al machete y cabalgó con nuevos ímpetus la caballería mambisa, que de una forma u otra ya no descansó hasta el Primero de Enero de 1959, cuando Cuba por fin vio hechos realidad los sueños de los próceres de la Patria.

Y aunque ya somos libres, la diana mambisa nos convoca aún a la batalla diaria, a esa que se libra hoy en el frente de las ideas, y en el de la práctica cotidiana por alcanzar otras soberanías como la energética, alimentaria, médica e informática. 

Somos un pueblo que no da tregua al enemigo, que lucha por conquistar un futuro mejor y herederos del legado de José Martí, Antonio Maceo, Máximo Gómez y del Mayor Ignacio Agramonte seguimos el rumbo que ellos trazaron certeramente.    

Frente al imperio yanqui y sus constantes amenazas nos erguimos como David ante Goliat, con una honda de dignidad que honra la sangre y el sudor derramados por los héroes y mártires para defender la libertad, muy en especial de los mercenarios y entreguistas que le hacen el juego a los que nunca han podido soportar que Cuba ya no sea propiedad del Tío Sam.

Este 24 de febrero y en cualquier otra fecha si nuestra libertad precisa defensa, se volverá a romper el corojo en toda esta isla, habitada por ciudadanos pacíficos que saben luchar por lo suyo sin hacer concesiones ni inclinarse, mucho menos ponerse de rodillas a mendigar lo que les pertenece por derecho.

¡Se lo debemos a Maceo, Gómez y Martí! ¡Se lo debemos a la Patria que nos contempla orgullosa y a todos los que desgranaron sus vidas en el fértil surco de la Revolución!

(Por: Iliana Pérez Lara/ Radio Santa Cruz)