Una Nueva Semilla comienza a brotar

Santa Cruz del Sur, 3 oct.- La Nueva Semilla es un centro donde los niños, como su principal público, podrán desenvolverse en las diferentes manifestaciones artísticas, algunas incluso pertenecientes al desarrollo cultural del municipio de Santa Cruz del Sur.

Desde el barrio en transformación Jacinto González, en la ciudad cabecera, este espacio invita a la recreación sana, el disfrute y el aprendizaje en aras de lograr la vinculación de diferentes generaciones en un lugar para el acercamiento al arte en el municipio.

Para conocer acerca de su funcionamiento y las actividades desarrolladas en él, la estudiante de Periodismo Daniela Álvarez Fernández conversó con Diosbel Pedrosa Borges, presidente de la Brigada de Instructores de Arte José Martí en el territorio y quien es el principal gestor del proyecto.

Periodista: ¿Cómo surge la idea?

Diosbel Pedrosa Borges: Surge en una conversación con la profe Taniana Molina Noda, antigua directora municipal de Educación, producto de la necesidad que tenía la comunidad de una escuela que funcionara como palacio de pioneros o centro socio-cultural, y para esa fecha estaba en desuso este inmueble. De ahí partió la idea inicial, todavía sin pensar en que pudiéramos consumar un presupuesto para hacer todo lo constructivo que necesitaba el local que fuera funcional y no tuviera peligros potenciales para los niños.

P: ¿En qué consiste?

D. P. B.: La idea central es aglutinar todas las capas etáreas pero principalmente los niños, por eso el nombre de La Nueva Semilla, que luego irradiaran en sus casas frutos, el gusto por el arte y una cultura del detalle más refinada. Aunque no todos vayan a ser artistas, que exista un público más exigente como soñara el Comandante en Jefe Fidel Castro cuando creó el programa nuestro, es decir la Brigada de Instructores de Arte José Martí.

P: ¿Qué aportes trae a la comunidad?

D. P. B.: La comunidad tiene potencial como artesanos, personas que trabajan la madera y mantienen la tradición del tejido de las redes como arte de pesca de nuestro municipio, otros que todavía cocinan platos tradicionales; todo esto aglutinarlo en este centro y transmitirlo a los niños, para que así se nutran de toda esta cultura del territorio y ocupen el tiempo libre en opciones de recreación sana y así aportarles una cultura general integral.

P: ¿Existen otras experiencias similares en el territorio?

D. P. B.: En un momento existió una pequeña acción comunitaria que quisimos emprender en otro local y logramos varias cosas aunque no llegamos nunca a ser un proyecto. No fructificó pero quedó ese sueño por cumplir, que hoy ya tenemos consumado.

P: ¿Cómo se desarrolló el proceso constructivo de la instalación?

D. P. B.: Fue un período duro, en un corto tiempo nos propusimos terminar una primera etapa y entregarla para el Día de la Rebeldía Nacional. Fueron jornadas de arduas labores pues con la situación económica que tenemos en el país sabemos que todo se hace un poco difícil pero pidiendo ayuda a varias entidades siempre alguien nos dio la mano y fue saliendo todo, se logró el objetivo de construirlo con la calidad requerida. Hay un segundo tiempo que empezó el primero de agosto, ya con el proyecto funcional pues desde ese mismo día comenzó su vida útil.

P: ¿Con qué espacios cuenta la institución?

D. P. B.: Cuenta con un ranchón principal, este tiene un escenario donde se realizan los espectáculos principales, actúa la unidad artística representativa del proyecto y en ocasiones también los talleres de danza, por ser un local amplio y ventilado, siendo esta la especialidad que más lo utiliza. Consta además con un aula mixta de música y danza para los talleres más selectos, un aula de artes plásticas y una de teatro. Hay otro espacio que quedó abierto, este se utilizará en algún momento en otros talleres. Un local pequeño funciona como la dirección del proyecto y de la brigada José Martí como tal y otro similar que será un almacén de vestuario y escenografía.

P: ¿Quiénes integran la unidad artística del proyecto?

D. P. B.: Los gestores del proyecto somos casi todos los instructores de arte de la cabecera y los de trayectoria reconocida del municipio que cuentan con una vasta labor ya consolidada en cada una de las escuelas.

P: ¿Para qué edades está pensado este proyecto?

D. P. B.: Aunque está concebido mayormente para los niños, trabajamos con casi todas las capas de edades de la sociedad, incluso en algún momento crearemos algunas actividades que serían propias para las personas de la tercera edad.

P: ¿Las personas que se desarrollan empíricamente en las diferentes vertientes de la cultura popular tradicional del municipio, también pueden incorporarse al proyecto?

D. P. B.: Esa es la idea, vincularnos con todos esos maestros y artesanos naturales de la comunidad, para que impartan talleres propios de lo aprendido a través de los años, ese folklore que se va transmitiendo en la familia de generación en generación.

P: ¿Qué actividades se desarrollan?

D. P. B.: Hay talleres de las manifestaciones de música, danza, artes plásticas y teatro, las cuatro potenciadas por la brigada José Martí, pero en un futuro queremos montar un taller de artesanía, compuesto por un torno, un foso de modelar barro y un horno. Contamos con un taller de artesanía para el trabajo con el coco, además de vincularnos a otros proyectos que hay en el municipio, por ejemplo existe uno con el yarey, donde los niños aprenderían a tejerlo. Hay otro en el que unas señoras llevan el tema del bordado, la costura y dentro de las actividades también estan las deportivas, pues los profesionales del INDER se vinculan a tiempo completo con nosotros en iniciativas con los niños de la Primera Infancia ya que estamos vinculados al programa Educa a tu Hijo.

P: ¿A dónde tiene que dirigirse la población para ingresar a los diferentes talleres?

D. P. B.: Pueden acercarse a nuestra sede e incorporarse a los talleres, desde el período veraniego estamos realizando actividades integradas con la comunidad.

P: ¿Algún requisito específico para integrarse a los talleres?

D. P. B.: Ya que el proyecto sociocultural radica en el barrio Jacinto González, los integrantes de los talleres preferiblemente deben pertenecer a esta localidad, sin embargo no nos limitamos a aceptar integrantes de otras zonas.

P: ¿En qué horarios estarán funcionando?

D. P. B.: Desde el verano estamos funcionando durante todo el día, los talleres se están desempeñando específicamente de nueve a diez de la mañana, pero el resto de la jornada nos mantenemos realizando actividades de conjunto con la comunidad.

P: ¿Para los instructores de arte qué representa tener esta institución?

D. P. B.: Un sueño hecho realidad, tener un espacio propio, aparte de todo lo que potenciamos en la Casa de Cultura, pero ahora contamos con un lugar que es un poco más nuestro, un lugar propicio para todas las actividades que nos propongamos.

P: ¿Qué aspiraciones futuras tienen con este proyecto?

D. P. B.: El taller de artesanía es de los futuros sueños que tenemos, en víspera a que el proyecto genere ingresos también para su propia sustentabilidad, por supuesto sin perder la esencia, que no se convierta en objetivo de lucro, sino que sea con vistas a suministrar todo lo que nos hace falta en cuanto a vestuario, escenografía, maquillaje y luces. También en cuanto se tengan varios espectáculos bien consolidados estaremos moviéndonos hacia otros lugares de la cabecera municipal.

(texto:Daniela Álvarez Fernández/ Estudiante de Periodismo.)(foto: Glendys Santiesteban Revolta)