Presidenta de Asamblea General de ONU aboga por diálogo en Venezuela
También el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, insiste en la necesidad del diálogo y mantiene su oferta de buenos oficios para ello, pero la opocisión venezolana rechaza de plano cuaquier tipo de iniciativa en ese sentido.
El pasado martes, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció un intento de un golpe de Estado con apoyo externo, acción que fue liderada por el autoproclamado mandatario encargado, Juan Guaidó, en las cercanías de la base aérea de La Carlota, en Caracas.
Un grupo reducido de miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana -unos 100- encabezó un intento de alzamiento en la madrugada del martes, con la participación además del líder opositor Leopoldo López.
Muchos de los militares implicados en el hecho mostraron luego su arrepentimiento y dijeron haber sido presionados y engañados, indican reportes de prensa.
Por su parte, el embajador de Venezuela ante la ONU, Samuel Moncada, hizo la denuncia ante la prensa acreditada en el organismo multilateral y rechazó el apoyo que esa acción recibió de Estados Unidos, Colombia, Argentina, Brasil, Chile, Panamá y Paraguay.
Lo ocurrido en Venezuela fue básicamente una operación mediática para abrir las puertas a un golpe militar, a una intervención y a un Gobierno títere, porque Washington considera a mi nación como parte de su propiedad, resaltó el diplomático.
De hecho, dijo, la única bombona de oxígeno que tienen esos sectores es el apoyo del Gobierno norteamericano.
En ese sentido, demandó una postura más fuerte por parte de la ONU, que no debería mantenerse imparcial cuando se ataca al Gobierno legítimo de un Estado miembro, apuntó el embajador.
También rechazó las sanciones y bloqueos de Estados Unidos contra su país, que resultan un castigo colectivo y hacen sufrir a todo un pueblo.
En tanto, el presidente norteamericano, Donald Trump, expresó por medio de su cuenta oficial en Twitter su respaldo al intento de golpe de Estado en Venezuela y pidió a los militares unirse a esa acción.
Tales muestras de injerencia en los asuntos internos de un país son rechazadas por un grupo de más de 60 Estados miembros de la ONU, que se unieron en defensa de la soberanía y de la Carta de Naciones Unidas.