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Parque Científico Tecnológico de La Habana: Crecimiento y colaboración (+ Video)

El Parque Científico Tecnológico de La Habana celebra este 2025 cinco años desde su creación, consolidándose como una plataforma clave para la innovación en Cuba. Esta iniciativa nació como parte de la estructuración de mecanismos dinamizadores en el país, permitiendo la integración de diversos actores económicos en un entorno de desarrollo tecnológico.

Actualmente una de sus grandes fortalezas ha sido la apertura a múltiples sectores, facilitando la participación de personas naturales, empresas extranjeras y estatales en la búsqueda de soluciones innovadoras a problemas concretos. Este enfoque ha acelerado el desarrollo de proyectos en un entorno más controlado, permitiendo resultados eficientes y de impacto, según dijo Ihoandra Sotolongo Carballo, directora de negocios del parque.

“Estos cinco años de fundado le han servido al parque para afianzar sus estructuras y fortalecer su capacidad de crecimiento, alineando sus expectativas en tres direcciones fundamentales”, añadió.

Según afirmó Rafael Luis Torralbas Ezpeleta, director de la entidad, su primera prioridad es continuar siendo un espacio para el desarrollo de proyectos de investigación, desarrollo e innovación, con el objetivo de acelerar resultados de alto impacto. Bajo este enfoque, cada iniciativa concebida en el parque está orientada a generar soluciones concretas que contribuyan a la transformación digital del país, especialmente en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación, área en la que el parque ha logrado una especialización estratégica.

“Nuestra expectativa es que la masa crítica de más de 30 empresas ya establecidas continúe expandiéndose, lo que fortalecería aún más el ecosistema del parque. Este modelo no solo persigue la creación de conexiones entre actores, sino que también facilita la interacción entre el sector productivo y el académico, ampliando el alcance y la diversidad de los proyectos que emergen dentro del parque”, agregó el presidente.

Otro aspecto clave es el crecimiento de la cartera de clientes, un elemento esencial para la sostenibilidad y proyección del parque. “En este sentido, el parque no solo conecta a las empresas incubadas con potenciales clientes, sino que también establece relaciones con organizaciones que desarrollan proyectos dentro del recinto y con aquellas que se benefician de los servicios brindados por el parque. Esta cartera ha crecido de manera natural, incluyendo a más de 20 clientes extranjeros, un indicador que deberá seguir expandiéndose para fortalecer la generación de ingresos por exportación”.

Parque Científico- Tecnológico de La Habana. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate/Archivo

A diferencia de otros parques científicos en el mundo, el Parque Científico Tecnológico de La Habana inició su labor incubando proyectos en lugar de empresas. En el momento de su creación, la ley de empresas aún no estaba vigente, por lo que operó bajo una modalidad de incubación de proyectos. Tras la promulgación de la ley, muchas de estas iniciativas lograron consolidarse como pequeñas y medianas empresas, estableciendo una sólida base tecnológica, así lo explicó Sotolongo Carballo.

“Uno de los casos representativos ha sido el ventilador pulmonar, desarrollado en colaboración con Combiomed. La implementación de su software estuvo a cargo de especialistas en informática vinculados al Parque, demostrando la capacidad de este modelo para congregar diversas entidades en función de sus competencias”, destacó la directora de negocios.

El parque con más de 30 entidades de base tecnológica, mayormente emprendimientos privados que buscan conectarse con el sector estatal y contribuir al desarrollo económico del país, ha facilitado la integración de jóvenes recién graduados y estudiantes en proyectos reales, incentivando su participación en la resolución de problemas sociales.

Como muestra de su trabajo y constancia, recientemente, el parque obtuvo la categoría de Full Member otorgada por la Asociación Internacional de Parques Científicos Tecnológicos del Mundo, un reconocimiento que le otorga visibilidad y voto dentro de esta organización global. “Como resultado, en 2026 Cuba será sede de la reunión regional de la Asociación Internacional de Parques Científicos, un evento sin precedentes que reunirá a representantes del Parque Científico de Matanzas y Las Villas, fortaleciendo la cooperación en el país”, confirmó Torralba.

“El modelo que hemos concebido para que funcione un parque en Cuba debe seguir consolidándose. En los próximos años, el Parque Científico Tecnológico de La Habana enfocará su crecimiento en tres líneas estratégicas fundamentales: el desarrollo de proyectos de investigación e innovación con impacto tangible en la transformación digital del país, la expansión del ecosistema empresarial para crear más empresas de base tecnológica y la consolidación de un modelo sostenible que garantice su autosuficiencia económica”, afirmó el presidente de la entidad.

“Este es un ecosistema que debe crecer en inversiones, en ingresos por exportación y en eficiencia empresarial. Si no se consolida económicamente, se convertiría en una carga para el Estado, y nuestro papel debe ser exactamente el contrario. Somos una entidad joven, tenemos mucho que aprender y debemos mirar a los parques con 20 o 30 años de experiencia para afianzar nuestro saber hacer”, aseguró.

Parque Científico Tecnológico de La Habana. Foto: Archivo

La propuesta del parque brinda la posibilidad a los emprendedores de aprovechar los resultados y la utilidad generada en el propio proceso de incubación. La dinámica les permite reproducir sus avances dentro de sus propios modelos de desarrollo, estimulando la creación de fondos destinados a potenciar sus iniciativas a futuro. Adicionalmente, el marco normativo del parque ofrece incentivos estratégicos para las empresas que operan en su interior, entre ellos la exoneración del impuesto sobre utilidad durante los primeros cinco años y la exoneración de aranceles sobre importaciones vinculadas al ciclo productivo.

En cuanto a proyectos recientes, uno de los primeros que transita hacia la constitución como empresa en incubación está relacionado con el comercio electrónico. Se trata de una plataforma digital que optimiza la gestión de alquiler de vehículos en Cuba, mediante una pasarela de pago que permite a usuarios desde el exterior realizar reservas en tiempo real. Transtur, la empresa estatal encargada de la comercialización de estos vehículos, logra así ampliar su alcance y garantizar una exportación de servicios, mientras que el equipo tecnológico detrás de la plataforma, ubicado en el parque, se beneficia del desarrollo de la iniciativa.

Otro caso destacado es el de entidades estatales que, aunque no cuentan con empresas propias dentro del parque, han apostado por desarrollar productos en su ecosistema. “Esto ha generado una mayor vinculación de estudiantes, quienes participan activamente en proyectos tecnológicos sin necesidad de estar físicamente en La Habana. Gracias a este esquema, jóvenes de diversas provincias, desde Santiago de Cuba hasta Pinar del Río, pueden incorporarse a iniciativas innovadoras y adquirir experiencia práctica alineada con su formación académica”, señaló la directora de negocios.

Desde el parque también se han impulsado proyectos con inteligencia artificial y análisis de datos a gran escala. Uno de los avances más relevantes en esta área ha sido el desarrollo de algoritmos para la detección de evasión fiscal y optimización de recaudación de fondos, permitiendo un análisis más preciso y efectivo de patrones financieros. Las herramientas generadas en estos proyectos cuentan con un alto grado de replicabilidad y podrían aplicarse en diversos escenarios que requieran el procesamiento de grandes volúmenes de datos.

En reconocimiento a su impacto, la entidad recibió recientemente la categoría de full member otorgada por la Asociación Internacional de Parques Científicos Tecnológicos del Mundo, lo que le otorga mayor visibilidad a nivel global y le permite participar en procesos decisivos dentro de esta red internacional. Este logro abre nuevas oportunidades de colaboración con otros parques científicos y fortalece la proyección del ecosistema innovador cubano.

Para Sotolongo Carballo, estos avances reflejan el papel fundamental que desempeña la institución como catalizador de la innovación en Cuba. Con una creciente comunidad de emprendedores y proyectos de alto impacto, el parque se perfila como un espacio estratégico para el desarrollo tecnológico del país.

Relacionado con las iniciativas para fomentar la colaboración, la generación de redes de emprendimiento y la consolidación de contactos estratégicos, se desarrolla anualmente el concurso Mi Idea 3CE, diseñado para estudiantes menores de 25 años con vocación innovadora. La convocatoria está abierta a jóvenes desde el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias hasta aquellos recién graduados.

“Esto permite presentar propuestas que, si demuestran alto impacto y viabilidad durante el campamento de innovación, pueden resultar ganadoras. Más allá del reconocimiento, el premio busca incentivar que las ideas se transformen en proyectos incubados dentro del parque, brindando a los participantes una plataforma para identificar colaboradores y consolidar sus iniciativas”, comentó la directora de negocios.

El certamen se celebra cada año y en su tercera edición incorporó, por primera vez, una categoría internacional, acogiendo estudiantes de dos universidades mexicanas. “La inclusión de participantes extranjeros refuerza el propósito del evento como un espacio de intercambio y cooperación, enriqueciendo el ecosistema de emprendimiento con experiencias y enfoques diversos”, explicó Sotolongo Carballo.

Para Torralbas Ezpeleta, estos logros son el resultado del esfuerzo colectivo de su equipo y de la confianza depositada por instituciones nacionales y extranjeras en el proyecto. El apoyo del gobierno, a través del Ministerio de las Comunicaciones, ha sido esencial, al igual que el papel de la Universidad de las Ciencias Informáticas, cuya existencia permitió el nacimiento del parque dentro de su campus universitario.

En cinco años, el Parque Científico Tecnológico de La Habana ha construido un modelo que no solo se ha consolidado, sino que también sirve como referencia para otros parques en Cuba y para futuros proyectos en la región. Con perspectivas de crecimiento y un firme compromiso con la innovación, el parque sigue apostando por la expansión de su ecosistema y el fortalecimiento de su impacto en el país.  (Tomado de Cubadebate)

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