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En nombre del pueblo de Cuba, Eusebio Leal despide a Alicia Alonso (+Fotos)

La Habana, 20 oct.- El historiador de la Ciudad de La Habana Eusebio Leal Spengler, despidió con emotivas palabras a la prima ballerina assoluta Alicia Alonso, a la cual llamó parte del alma invisible de Cuba, en la capitalina Necrópolis de Colón.

Dichosa tú, que al entrar en este instante es ese provisorio silencio y sombra que acompañan necesariamente esto que el hombre, el ser humano, ha llamado la muerte, te libras de ella por tu obra, te libras de ella por la grandeza de tu voluntad férrea tantas veces demostrada, inició su discurso de este sábado el Historiador de La Habana.

Conocías del acierto y del desacierto, de lo perfecto o de lo que se acercaba a ello, dijo Leal en su alocución dedicada a la gran bailarina cubana, fallecida el jueves último a los 98 años de edad.

Al evocar a José Martí, Héroe Nacional de Cuba, expresó a los presentes que la muerte no es verdad para aquellos que han cumplido bien la obra de la vida.

Se convierte en un carro de gloria para los que, como tú, han alcanzado la fama y el amor de un pueblo, continuó.

Leal Spengler habló del amor de Alicia por Cuba, a cuya Cultura tanto contribuyó, desde el compromiso con la Revolución, la juventud y con el arte, llevando el ballet a todos, demostrando que “cualquiera tenía in situ la genialidad, la capacidad de volar y llegar a cualquier parte”.

Tú eres parte de nuestro tesoro, insistió, y destacó que todos los honores que Cuba pudo tributarle los recibió en vida y que este no sería el último.

La Revolución hizo y favoreció tu obra y tu sueño, Fidel pudo decir un día, con razón, que tú habías logrado casi lo imposible, expresó Leal, y comentó también acerca del amor de la prima ballerina assoluta por La Habana, sobre la cual un día dijo que representaba para ella las raíces.

Los restos mortales de Alicia Alonso, que descansarán en la bóveda familiar junto a sus padres Antonio Martínez y Ernestina del Hoyo, fueron despedidos por sus familiares, amigos, discípulos, personalidades de la Cultura, funcionarios del Partido Comunista y del Gobierno cubanos, y por su pueblo querido, que la acompañó hasta el último momento.

Los aplausos y gritos de ¡Bravo, Alicia! no faltaron, tampoco las lágrimas, ni el compromiso del Ballet Nacional de Cuba, allí presente, de transmitir su legado a las nuevas generaciones para que su obra no muera jamás. (ACN) (Fotos: Cubadebate y ACN)