Del miedo al odio y la secuencia contra Cuba

La Habana, 5 nov.- La campaña mediática contra Cuba es un programa bien elaborado para inducir estrés y agotar los recursos psicológicos del sujeto en busca de un estallido social, aseguraron aquí fuentes especializadas.

 

En exclusiva con Prensa Latina, el doctor en Ciencias Psicológicas Dionisio Zaldívar enfatizó que esta campaña de odio, recrudecida durante los últimos cuatros años, encuentra en el pueblo cubano una gran capacidad de resiliencia para hacerle frente.

‘Este tipo de acciones contra Cuba han sido sistemáticas desde el triunfo de la Revolución y están dirigidas a resquebrajar la resistencia, a crear desilusión y frustración para que las personas sientan que no hay futuro’, comentó.

En opinión del también profesor titular de la Universidad de La Habana, esta campaña va contra los valores fundamentales que defiende la mayoría de la población en la isla.

‘Durante la administración de Donald Trump se han empleado medidas que superan a las anteriores, por ejemplo, ya no se trata sólo de denigrar instituciones estatales o representantes de la política, ahora cualquier persona con prestigio o influencia puede ser un objetivo’, dijo.

Para Zaldívar, un artista o intelectual que de alguna manera manifieste su acuerdo con los principios de la Revolución o que evidencie su amor patrio más allá de cuestiones políticas, puede ser víctima de esta campaña.

‘Se trata de una nueva etapa en la guerra psicológica contra Cuba, enfocada en silenciar los testimonios de personas con influencia mediante el uso de fakenews (noticias falsas), muy utilizadas en la política norteamericana’, enfatizó.

De acuerdo con el profesor, los ejecutores de esta campaña han estudiado cuáles son las poblaciones más vulnerables para generar la apatía social, el descontento y el estallido social.

‘Los jóvenes son un objetivo importante, pero también aquellos que influencian el comportamiento de esa juventud’, aseguró.

Sobre este particular, el historiador cubano Fabio Fernández acentuó que esta campaña contra la isla busca además apropiarse de símbolos del pasado nacional para descontextualizar la historia.

‘La estrategia consiste en desligar a los jóvenes del relato que les han contado y con ello potenciar su desapego respecto al presente, todo esto en función de convertirlos en actores de la ansiada restauración capitalista’, dijo a Prensa Latina.

En consecuencia con esta idea, el psicólogo asegura que la intención es doblegar a quienes carecen de la suficiente conciencia para darse cuenta de la manipulación o anteponen sus intereses.

‘Sin embargo, contrario a lo que aspiran los ejecutores de esta campaña, artistas y músicos injuriados han recibido el apoyo de las instituciones estatales y del pueblo a través de las redes sociales’, subrayó.

El presidente de la nación caribeña, Miguel Díaz-Canel, catalogó a los precursores de ese odio contra la isla como un ‘virtual ejército mercenario’.

‘Bajo una campaña pagada ataca a intelectuales y defensores de la Revolución y promueve un linchamiento virtual para silenciar voces y desvirtuar liderazgos’, agregó.

Según el mandatario, se trata de una retórica anticubana comparable a los momentos de la guerra fría, que se hace acompañar de acciones de descrédito contra la Revolución y sus dirigentes.

En este sentido, Zaldívar considera que la resiliencia del pueblo cubano frente a este tipo de cerco se ha creado a partir de una percepción realista de los acontecimientos.

‘Creo que en promedio, los cubanos son conscientes sobre lo que significaría perder lo logrado dentro de la Revolución, no solamente por lo que ocurriría en Cuba, sino por las experiencias vistas en el mundo y en nuestra región donde procesos progresistas han retrocedido producto a campañas como estas’, acotó.

Para el especialista, esta agudeza del pueblo cubano frente a una retórica bien elaborada, unido a su resistencia y creatividad, permite a la isla salir victoriosa y avanzar pese a la adversidad.

Díaz-Canel reflexionó recientemente sobre lo absurdo de estas reacciones de odio de una gran potencia respecto a un país como Cuba.

‘Estados Unidos se demerita, se ridiculiza y se aísla a nivel internacional, debería darles vergüenza la brutalidad con la que han acosado a esta pequeña isla, solo han recibido reveses’, aseguró el mandatario.