Deporte

[:es]Camagüey cada vez más lejos de la clasificación en Béisbol cubano[:]

[:es]beisbol-cmgHabana, 12 dic.- Pasan los días, pasan los doble juegos, y la 56 Serie Nacional abre cada vez más la brecha entre los cuatro punteros y la dupla de perseguidores. El objetivo de incluirse en la postemporada aparece ahora en un horizonte muy lejano para Holguín y Camagüey, conjuntos que tendrán que subir la cuesta más empinada del año si pretenden clasificar.

Este domingo, Cachorros y Toros cayeron en la doble cartelera frente a Granma y Villa Clara, respectivamente, multiplicando su dolor al tropezar en casa y con marcadores abultados.

Los pupilos de Noelvis González soportaron 20 carreras frente a los granmenses, quienes se apoyaron en notable labor monticular de Lázaro Blanco y Yoalkis Cruz, ambos efectivos durante siete episodios.

Denis Laza, Carlos Benítez y Yoelkis Céspedes remolcaron diez en conjunto, mientras el torpedero Yulián Milán despachó cuatro inatrapables en ocho turnos, con jonrón, doble, tres anotadas y una impulsada.

Tras estos fracasos, los holguineros se distanciaron a 9,5 juegos del cuarto escaño, y les restan 17 partidos para cerrar su calendario. Con 34 éxitos, necesitarían una racha triunfal imponente que se combine con el descalabro absoluto de Granma o Villa Clara.

Más complejo es el panorama de los agramontinos, alejados a 11 rayas de la zona de clasificación. Su domingo fue tortuoso, porque sostuvieron cerrados duelos frente a los Azucareros durante seis capítulos, pero el séptimo episodio fue funesto en los dos pleitos.

En el primer encuentro, cuando el partido estaba 2-1 favorable a los villaclareños, Reinier León largó doble con el bote lleno que limpió las bases, seguido por jonrón de dos carreras de Michael González.

Ya en el segundo duelo, otra vez con ventaja mínima (1-0) de los Naranjas, un error del antesalista Yosbel Pérez y conexiones cruciales de Andy Sarduy y Yandrys Canto fulminaron a los camagüeyanos.

Por si fuera poco, Yosvani Torres y Alain Sánchez, los abridores de Villa Clara, se combinaron durante 16 sólidos capítulos, en los cuales permitieron solo una limpia, con 14 ponches y dos boletos.

En el enfrentamiento que medía a los líderes, Ciego de Ávila se llevó la victoria sobre Matanzas en el primer juego, definido en diez entradas luego de remontadas de los dos elencos. Los Tigres se recuperaron de un inicio dubitativo y borraron desventaja de tres a la mitad del choque, y luego en el octavo igualaron.

El desenlace llegó en el décimo, cuando Rubén Valdez disparó cohete remolcador con las bases llenas y dos outs, justo unos minutos después de que el matancero Roberto Acea fallara un intento de squeeze play con los ángulos congestionados y solo un out en la pizarra.

En el duelo del cierre, los roles se invirtieron y los yumurinos borraron por arte de magia un déficit de cinco carreras en el octavo capítulo. Siete anotaciones marcaron los Cocodrilos frente al relevo avileño, seis de ellas con dos outs, y luego añadieron otras cuatro en el noveno, para sumar su victoria 56 del Campeonato.

El marcador final fue 16-11 en un partido deslucido, no solo por el naufragio de los lanzadores, sino también por la friolera de nueve errores, todo ellos, recordamos, con los dos conjuntos de mejores números en la temporada. (Tomado de Granma)[:]