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Balancearse ayuda a dormir rápido y profundamente

Ginebra, 26 ene.-El movimiento lento y repetido durante la noche modula la actividad de las ondas cerebrales, induce un sueño más profundo y ayuda a fortalecer la memoria, aseguran dos estudios divulgados hoy en medios de prensa.

 

Las investigaciones, realizadas por las universidades de Ginebra y Lausana, y los Hospitales Universitarios de Ginebra, en Suiza, se basaron en la comprensión del por qué mecerse promueve el sueño y los mecanismos cerebrales que participan en este fenómeno.

El primer estudio, dirigido por Laurence Bayer, exploró el impacto del balanceo continuo en el sueño y en las ondas cerebrales que lo caracterizan en 18 adultos jóvenes sanos que pernoctaron en el Centro de Medicina del Sueño.

Mediante grabaciones polisomnográficas se registraron diversas variables en las frecuencias cardíaca y respiratoria, así como en electroencefalogramas de los participantes que pasaron una noche en una cama móvil y otra en una posición inmóvil.

Según Bayer, pudieron observar que los voluntarios, aunque durmieron bien en ambos casos, lo hicieron más rápido, tuvieron mayores períodos de sueño profundo y menos micro despertadores, factor frecuentemente asociado con la mala calidad del sueño.

En el segundo estudio, llevado a cabo con ratones y liderado por Paul Franken, se demostró igualmente que el mover las jaulas redujo el tiempo que los animales necesitaron para conciliar el sueño y aumentar la duración del mismo; sin embargo, no aumentó la calidad del sueño, a diferencia de lo demostrado en los seres humanos.

Según los científicos participantes, el refuerzo del sueño profundo mediante el balanceo es la consecuencia directa de la modulación de la actividad de las ondas cerebrales durante el sueño y permite sincronizar la actividad neuronal de las redes tálamocortico-corticales, que desempeñan un papel importante en la consolidación del sueño.

Para comprobar si este efecto también afectó a la memoria, los participantes del primer estudio tuvieron que aprender pares de palabras por la tarde y recordarlas al despertarse por la mañana.

Los resultados de la prueba fueron mejores después de una noche en movimiento, que en comparación con una tranquila.