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Anciana santacruceña siente a Vilma y Fidel más vivos que nunca

Santa Cruz del Sur, 17 ago.- A los 80 años la fundadora de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) de esta localidad Ester Gutiérrez Viamontes siente a Vilma Espín, la eterna presidenta de la organización de masas y a Fidel, de manera muy especial.

“Los recuerdo a los dos. Cuando pienso en ellos me siento bien y orgullosa. Ellos formaron parte del pueblo. Los siento presentes en mi corazón. Por eso sigo siendo revolucionaria hasta que me muera. Nadie me hará cambiar mi forma de pensar”, resaltó la anciana.

La lugareña nació junto a otros siete hermanos en el barrio de Sagasta, ubicado en tierras del antiguo central Macareño, donde se encuentra la actual comunidad santacruceña de Haití.

“Éramos muy pobres. No teníamos prácticamente zapatos ni ropas que ponernos. Quedamos huérfanos de madre. Ella murió durante el parto de mi hermano más chiquito. A papá no le dio tiempo sacarla del medio del monte hasta el hospitalito de Macareño. Si hubiéramos vivido más cerca tal vez mamá se hubiese salvado”, declaró entristecida.

La fémina rememoró la ayuda a fuerzas rebeldes que se asentaban en los montes de San Miguel del Junco. “Les lavábamos la ropa. Era nuestro deber.  Ni mi familia ni yo nunca sentimos miedo. Sabíamos que estábamos colaborando por una buena causa”.

Por las mañanas Ester Gutiérrez Viamontes barre el tramo de vía, al frente de su casa, situada en la calle G entre Oriente y 9 de Noviembre de la ciudad cabecera, con un jardín perfumado por los jazmines y flores. “Pensar en Vilma y Fidel me mantiene con mucha energía revolucionaria”, fundamentó.