Resistencia hondureña mantendrá protestas en comunidades
Tegucigalpa, 24 sep .- El Frente Nacional contra el golpe de Estado de Honduras continuará hoy la estrategia de movilizaciones en barriadas y otras comunidades en su lucha por la restitución del orden constitucional.
Voceros de esa alianza de fuerzas populares informaron anoche que la oposición a la asonada castrense del 28 de junio se mantendrá hasta obtener la victoria del pueblo y el retorno a su puesto del derrocado presidente Manuel Zelaya.
El estadista regresó sorpresivamente al país el lunes último y se encuentra en la sede de la embajada de Brasil, donde hizo un llamado al diálogo para encontrar una solución pacífica a la crisis.
Los miembros de la resistencia realizaron ayer una multitudinaria marcha hacia la sede diplomática, pero los agentes antimotines les cerraron el paso a unas tres cuadras de la misión diplomática, cercada por soldados y policías.
Grupos afines al gobierno de facto anunciaron que este jueves marcharán hacia ese sector de la ciudad, la colonia Palmira.
El abogado Racel Tomé denunció que el régimen quiere obligar a los empleados públicos a asistir a la movilización, a la cual dijo que llevará militares, reservistas y policías vestidos de civil.
Sectores de la resistencia alertaron sobre rumores de un plan para dejar entrar a esas personas a la embajada de Brasil y sacar a Zelaya y sus acompañantes a fin de presentarlo como una acción del pueblo.
El estadista aseguró anoche en declaraciones a la emisora Radio Globo que se encuentra tranquilo, a pesar de las acciones de guerra psicológica emprendidas por el ejército en su contra y quienes le acompañan.
Durante la noche de este miércoles en muchas barriadas de la capital la población continuó con sus movilizaciones antigolpistas y en varias áreas fue reprimida por policías, de acuerdo con denuncias difundidas por la radioemisora.
El coordinador general del Frente, Juan Barahona, dijo a Prensa Latina que "la resistencia está en todas partes y es difícil que los golpistas la puedan controlar, por ello la victoria del pueblo está cada vez más cerca".
La insurrección en las colonias de Tegucigalpa y otras partes del país es una muestra que ante un pueblo organizado y movilizado, no hay ejército y policía que pueda detenerlo, subrayó. (PL)