Hija de antiterrorista cubano destaca importancia de solidaridad con Los Cinco
Próximos a cumplir 16 años de injusta condena continúan tres de los Cinco héroes antiterroristas cubano en cárceles de Estados Unidos: Ramón Labañino, Gerardo Hernández y Antonio Guerrero. La familia, el pueblo cubano y el de muchas partes del mundo lo sufren y luchan por su liberación.
Ailí Labañino Cardoso, la hija de Ramón, asiste a un encuentro de solidaridad en la División Territorial de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) en esta ciudad del centro sur del archipiélago, el primero que se creó en el país, con un sitial en honor dedicado a los Cinco luchadores, de los cuales ya se encuentran en la Patria Fernando y René González.
Ailí recuerda los encuentros sostenidos con su padre y las recomendaciones. Puntualizó que la situación más complicada es la de Gerardo, sin fecha de salida, con dos cadenas perpetuas más 15 años, y comenta: “Le harían falta tres vidas reales: Morir, nacer y volver a morir, y en la tercera vida, a los 15 años tendría la libertad. Algo ilógico para un humano”.
Menciona el caso de Tony, que tiene fecha de salida para el 2017, sin contar los cinco años de libertad condicional en territorio norteamericano, “y mi papá -dice-, la fecha de liberación sería en el 2024”.
“Cada vez que se comunica con nosotros es para saber qué hiciste hoy, ayer y lo previsto para mañana. Nos pide estudiar, trabajar y seguir alzando las voces por ellos. Dedica el tiempo a leer. Se traga las lágrimas y devuelve amor”, agrega la joven.
Y con ese amor, Ailí Labañino llora el largo e injusto encierro de su padre. Precisa: “Hay muchos días que uno amanece susceptible y tiene ganas de que esté con nosotros (llora), pero no es momento de lágrimas, como decía una amiga argentina, de 96 años de edad, es de luchar con la palabra, la razón y las acciones”.
“Soy una joven cubana, como otra cualquiera, muy orgullosa de haber nacido aquí y de tener a mi padre -añade-, que es un amigo especial y con quien hablo de cualquier tema, mientras él trata de guiarme para no darme tantos golpes en la vida. Y no siempre puedo escuchar su voz, ni hacerle una visita”.
“Impacta cómo se refugian en el arte, leyendo, dibujando, haciendo poemas, escribiéndoles a los amigos. Creo que el optimismo y el deseo de vivir les dan fuerza, unido a la solidaridad en el orbe, que clama por ellos”; expresa.
“¡Ojalá no tengan que cumplir las condenas!, exclama. “Y que en los Estados Unidos conozcan lo que tienen en sus entrañas, y que son tres pedazos de amor. Ellos desean abrazar a Fidel y a Raúl. Mi papá, en cada visita me dice que ese es su sueño, además de ir a la tumba de su madre, subir el Turquino, sentarse en el malecón y viajar de oriente a occidente besando a todos los cubanos”. (Tomado de Radio Rebelde) (Foto:Archivo)