Fotógrafo cubano trabaja la plata virada, una técnica centenaria

Cienfuegos, Cuba, 15 jun . – El fotógrafo cubano Omar García Valenti trabaja aún la plata virada, una técnica en el arte de atrapar imágenes que data de principios del siglo XX y hoy resulta bastante rara en su oficio.

García Valenti, autor de exposiciones montadas en Canadá, Chile, Ecuador, Francia y Suecia, comentó a Prensa Latina que debido al factor complejidad y los recursos demandados para su realización tal práctica ha perdido muchos adeptos, más en la era de la digitalización y la masividad.

Son las fotos más difíciles de hacer, facturadas manualmente en su totalidad y nunca salen dos iguales, cada una es un original, por tanto resultan las mejor pagadas en el mercado del arte, explicó en su hogar, donde asegura vivió mucho antes Juan David, un genio de la caricatura en Cuba.

A partir de una primera impresión en blanco y negro, la plata virada puede superponer sobre el papel de gelatina tonos como la sepia, azul, verde o amarillo.

Todo depende del proceso químico que uses en el "viraje", por ejemplo el cloruro de oro proporciona una tonalidad roja, el citrato de hierro amoniacal da un azul-verde y el sulfuro de sodio se traduce en sepia, argumenta el reconocido artista de Cienfuegos, 250 kilómetros al sudeste de La Habana.

Acerca del tiempo empleado en el laboratorio para lograr una plata virada considera que puede ir desde los 30 minutos hasta ocho horas de trabajo, aunque en casos excepcionales pudiera durar más de un día.

Supone un dominio del arte fotográfico en su concepción original, las nuevas generaciones de fotógrafos, por lógica del desarrollo, se decantan hacia las técnicas de más fácil manejo basadas en la digitalización, expone mientras parece acariciar una tradicional cámara de negativos (película).

Muy selectivo con su labor profesional, García Valenti, ganador de premios en varios salones fotográficos en Cuba, asegura en su trayectoria cercana a un cuarto de siglo habrá facturado unas 800 instantáneas con carácter expositivo.

A la hora de mencionar un hito en su currículum menciona la fecha del 1 de diciembre de 1995, cuando logró la primera foto a color – para algunos la primera absoluta- de la estalagmita de la cueva Martín Infierno, en las montañas del centro de la Isla, y considerada la mayor del mundo.

En condiciones de cero iluminación dentro de la gigantesca furnia, logré la imagen con película y con el empleo en las luces de una mezcla de magnesio con aluminio, nunca más he visitado el lugar, recuerda García Valenti.(PL)