Buho gigante entre restos encontrados en cueva de Gibara
Holguín, 23 abr .- La presencia de un buho gigante entre los restos óseos localizados en una cueva de la zona de La Gegira, del municipio holguinero de Gibara, ratificó la importancia de profundizar los estudios del carso de esa región.
Los restos encontrados en el techo de una galería de la cueva La Lechuza, una de las existentes en la Sierrita de Cupeycillo, fueron clasificados como correspondientes al Pleistoceno tardío y al Holoceno temprano cubano, entre 20 mil y seis mil años antes del presente.
Luis Mariano Rodríguez, paleontólogo del grupo de Investigaciones Científicas de Gibara, de la Sociedad Espeleológica en la provincia, señaló a la AIN que los huesos están mineralizados y que entre ellos destacó una cintura pélvica del antiguo buho, que alcanzó un metro de altura.
Abundó que conocido científicamente como el Ornimegalonyx, era un ave carnívora de cortas alas que probablemente no podía volar, pero poseía largas patas y pequeño esternón al parecer para facilitar la captura de sus presas mediante la carrera.
En el agrupamiento óseo, denominado Orictocenosis, también identificaron la presencia de un mamífero de hábitos arbóreos, nombrado Neocnus gliriformis, considerado antecesor de todos los perezosos del continente latinoamericano.
La especialista en arqueozoología Lourdes Pérez agregó que igualmente se definieron restos fosilizados de jutías, de los géneros extintos Boromys, Geocapromys y Capromys pilorides, y una pieza dentaria de un almiquí, insectívoro cuyos ejemplares hoy se consideran fósiles vivientes.
Juan Guarch, presidente de la Sociedad Espeleológica en el territorio, afirmó que este hallazgo paleontológico incrementa las localidades y diversidad de la fauna pleistocénica identificada en Holguín.
La expedición que arribó a estas conclusiones se realizó entre el 13 y 15 últimos, para hacer estudios in situ y extraer muestras sueltas, a fin de preservar el grueso del depósito óseo en aras de investigaciones de mayor rigor científico.
En la indagación, que permitió igualmente ampliar el cartografiado de la cueva La Lechuza y explorar nuevas zonas, participaron además, los grupos espeleológicos Taguabo, Cársico y Cristal y especialistas del departamento de Arqueología del Centro de Investigaciones y Servicios Ambientales y Tecnológicos, de la ciudad de Holguín.(AIN)
