Economía

Esfuerzo y disciplina, claves para actualizar el modelo económico en Cuba

Esfuerzo y disciplina, claves para actualizar el modelo económico en CubaEl modelo económico cubano se actualiza y ello obliga a la mayoría a cambiar hábitos de vida, a esforzarse más en la labor cotidiana y a disciplinarse y apegarse más a lo legislado.

Aires renovadores se respiran en cada rincón del país desde el pasado año con la materialización de los lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución, aprobados en el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba.

Hace tan sólo unos meses, por ejemplo, no existía la posibilidad de vender legalmente una vivienda o un vehículo y resultaba difícil adquirir legalmente materiales para la construcción de una casa, ahora se ofrecen facilidades tanto en los bancos como en las tiendas, donde están a la venta lo mismo cemento que acero.

La reducción de las plantillas infladas, las flexibilizaciones para el trabajo por cuenta propia, el otorgamiento de créditos bancarios, y la concesión de subsidios a personas sin solvencia económica, también forman parte de los pasos que se dan sin prisa pero sin pausa en la sociedad cubana de hoy.

Se trata de cambiar todo lo que se deba, especialmente las mentalidades, acostumbradas por muchísimo tiempo a que el Gobierno asumiera la carga, incluso de asuntos muy personales.

La vida se reordena pero ello no quiere decir, en ningún momento, que el Estado se desentienda de las cuestiones priorizadas.

En Camagüey se registran más de 20 000 trabajadores por cuenta propia y aunque es cierto que a través de sus impuestos representan ingresos, la Empresa Estatal Socialista mantiene la primacía.

Pese a tensiones financieras y al pronóstico de algo más de 1 700 millones de dólares por concepto de importaciones de alimentos para el país durante este año, el gobierno revolucionario continúa asumiendo programas de alto impacto social.

Para el 2012 el plan de inversiones en predios camagüeyanos estará respaldado por unos 95, 2 millones de pesos en moneda total que se destinarán a obras nominalizadas en el Hospital Provincial Manuel Ascunce Domenech, en la capital agramontina, y al hospital Ernesto Che Guevara, en Santa Cruz del Sur, así como a la reparación capital y terminación de viviendas, especialmente las destinadas a discapacitados y a damnificados de eventos meteorológicos.

También se sufragará el programa de reposición de ascensores en edificios altos, la restauración del centro histórico de la ciudad de Camagüey, la remotorización de ómnibus y el arreglo de parte de los caminos lecheros.

Con el fin de que el engranaje entre todos los implicados en impulsar la economía cubana se impone cumplir al pie de la letra los contratos entre empresas, cerrarle la brecha al delito y a las indisciplinas y ahorrar para reducir gastos de todo tipo.

Nadie piense que tamaña tarea resulta fácil y que en un abrir y cerrar de ojos se apreciarán saltos espectaculares. De cada cubano dependerá el momento en que tales beneficios comiencen a palparse.

(Tomado de Radio Cadena Agramonte digital)