Parque Guanahacabibes, una década por el patrimonio natural cubano

Pinar del Río, Cuba, 14 dic . – Con ecosistemas únicos de significación internacional, el Parque Nacional Guanahacabibes celebra hoy una década de fundado en la península cubana homónima, catalogada como prominente corredor de aves migratorias.

El occidental paraje, salpicado de farallones y diente de perro, es sitio de anidación de tortugas marinas, iguanas y abundantes especies de pájaros, algunos de ellos encuentran abrigo en una de las últimas selvas del Caribe.

Preservar el patrimonio natural del lugar, que marca el límite oeste de la isla, es desvelo de los científicos pinareños, expresó a Prensa Latina Lázaro Márquez, director del Parque Nacional Guanahacabibes, núcleo de la Reserva de la Biosfera, de igual nombre.

Comentó que la zona alberga ecosistemas de extraordinaria singularidad y riqueza, entre los que destacan los bosques semideciduos y los complejos de vegetación de costa arenosa y rocosa.

Igualmente revelantes son los arrecifes coralinos hallados en la costa sur, los cuales clasifican entre los más diversos del área caribeña y los mejor conservados de Cuba, donde abunda la variedad negra, afirmó Márquez.

Estos fondos de espectacular belleza ofrecen oportunidades exclusivas para el buceo contemplativo y funcionan como bancos genéticos de especies de gran valor desde el punto de vista estético y económico, aseguró el experto.

Al referirse a los monitoreos de criaturas amenazadas resaltó los avances del proyecto dedicado al estudio y cuidado de las tortugas marinas, desarrollado durante 14 años y que ha permitido profundizar las investigaciones sobre esos antiguos habitantes del Océano, actualmente en peligro de extinción.

El programa en el que participan profesores y estudiantes de la Universidad de La Habana, contribuye a la conservación de esos reptiles y sus nidadas, al abrir las puertas a las comunidades del territorio.

Dirigidas a niños y al resto de los pobladores, la ejecución de iniciativas de educación ambiental sustenta las misiones conservacionistas en un entorno privilegiado, insistió.

La protección de los sitios de nidificación de aves e iguanas y de otras áreas de desove, resulta también prioridad de los especialistas de la apartada localidad, conocida además como El Cabo.

Guanahacabibes -precisó- sobresale entre los escenarios protegidos de la nación por poseer el inventario más completo y actualizado sobre los moluscos marinos, registro avalado por sistemáticas pesquisas, durante las cuales se realizaron nuevos reportes para la ciencia.

Con tres senderos diseñados para el turismo ecológico, la península recibió a unos 20 mil visitantes extranjeros interesados en los recorridos hacia Cueva Las Perlas, el itinerario del bosque al mar, y un paseo por el Cabo de San Antonio, entre farallones.

Muy demandada por viajeros provenientes de varios continentes, la observación de tortugas marinas es otra de las ofertas recientes de esa modalidad de esparcimiento, aseveró Márquez.(PL)