Cultura

Laureada cinta cubana se estrena este jueves en el país

Laureada cinta cubana se estrena este jueves en el paísLa Habana, 13 ene .- Siguen los estrenos cubanos de cine, y en esta ocasión se trata del filme El cuerno de la abundancia, de Juan Carlos Tabío, tercer premio Coral en el XXX Festival del Nuevo cine latinoamericano.
    
La citada cinta podrá apreciarse desde este jueves 15 en el circuito de estrenos de la capital y en principales salas del país, de acuerdo con lo programado que incluye su tránsito el resto del mes en otras salas, para beneplácito del público que la recibió ya con largas colas en los días de la cita internacional.    
     
Pocas veces las comedias logran lauros en concursos del séptimo arte o son apreciadas en su justa medida, pues no suele ser la tendencia de los jurados o críticos en el orbe, pero Tabío y el escritor Arturo Arango, -en un dueto que no es nuevo- obtuvieron además el premio de guión en esa edición de la fiesta del cine.
     
La historia transcurre sobre rieles, orgánica, con actuaciones para destacar como son los casos de Jorge Perugorría- el actor más internacional con que cuenta hoy el país-, la talentosa Laura de la Uz y la propia Mirta Ibarra y Vladimir Cruz.
    
Hay guiños dentro del filme a otros de gran reconocimiento en Cuba, lo que es una característica del realizador Tabío, director de cintas como Se permuta, Plaff, El elefante y la bicicleta, y Fresa y chocolate, donde compartió la dirección con Tomás Gutiérrez Alea (Titón).
     
En ocasión de su estreno,  Tabío explicó que una de las complejidades del filme resultó la gran cantidad de actores que participaron, y destacó los roles de destacados artistas que sólo aparecen unos minutos.
   
Un tema universal como es el de las herencias, es el centro de la cinta llevada al plano de un pequeño pueblo imaginario, Yaraguey, donde viven los Castiñeiras, supuestos herederos de la fortuna.
   
Esa historia puntual nos lleva de la mano de hilarantes escenas a una reflexión en un entorno más amplio.
    
Criterios encontrados reconocen valores de este filme, que resulta no sólo continuidad armónica de Tabío en el difícil arte de hacer comedias, sino una de las mejores de su tipo en la historia del cine cubano.(AIN)