Cuba: actualizar modelo económico y fortalecer el socialismo
El VI Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) sentó las pautas para actualizar el modelo económico de este país y fortalecer el carácter irreversible de su sistema socialista, como establece la Constitución.
Orden, disciplina y exigencia en las acciones futuras deben ser denominador común en el empeño de los cubanos, recomendó el Primer Secretario de la organización, Raúl Castro, durante la clausura de dicho encuentro, celebrado entre el 16 y el 19 de abril último.
La necesaria meta se logrará gradualmente en el transcurso del quinquenio, consideró el también presidente de la mayor de las Antillas en su discurso ante los delegados, entre quienes figuró el líder de la Revolución, Fidel Castro.
Manifestó que es mucho el trabajo de detalle, planificación y coordinación en el plano jurídico y en la preparación minuciosa de todos los que intervengan en la ejecución práctica para conseguir los objetivos propuestos.
Raúl Castro exhortó a desarrollar una intensa labor de divulgación a la población sobre cada medida adoptada y a mantener los oídos bien atentos y los pies pegados a la tierra en aras de superar los obstáculos que se encuentren y rectificar rápidamente los fallos.
No renunciaremos a hacer los cambios que hagan falta, los efectuaremos al ritmo que demanden las circunstancias objetivas y siempre con el apoyo y comprensión de la ciudadanía, sin poner nunca en riesgo nuestra arma más poderosa: la unidad de la nación en torno a la Revolución y sus programas, argumentó.
Avanzaremos, enfatizó, con decisión a pesar del bloqueo económico de Estados Unidos contra la isla y las adversas condiciones imperantes en el mercado internacional, expresadas en las restricciones para el acceso de Cuba a fuentes de financiamiento y la espiral de los precios del petróleo.
INFORME CENTRAL Y LINEAMIENTOS DE LA POLÍTICA ECON�"MICA Y SOCIAL
Durante el evento, los delegados discutieron y aprobaron el Informe Central a la cita presentado por Raúl Castro en la inauguración, y cuyo contenido consideraron como una valoración objetiva del crucial momento que vive el país.
Ese texto, reconocieron, evalúa con realismo, concisión y justeza las tareas que el pueblo cubano acomete en medio de los peligros y dificultades impuestos por la compleja situación internacional.
Paralelamente no se descuidarán un instante los pilares que garantizan la soberanía e independencia de la mayor de las Antillas: la unidad del pueblo y su permanente disposición a defender a cualquier precio el socialismo.
El documento ratifica que la isla continuará defendiéndose de las agresiones de Estados Unidos y reitera la disposición al diálogo bilateral basado en el respeto mutuo y la no injerencia en los asuntos internos de cada país.
Subraya que la administración estadounidense no ceja en sus planes de destruir a la Revolución cubana, y actualmente financia disímiles proyectos para subvertir su orden.
A los gobernantes norteamericanos no les interesa remitirse a la historia, el bloqueo contra nuestro país no es cosa del pasado, recalcó Raúl Castro.
La política de Washington hacia Cuba carece de credibilidad y sustento moral, y para tratar de justificarla se esgrimen pretextos increíbles, que al volverse obsoletos, van cambiando según su conveniencia, expresó.
Recordó que el gobierno norteamericano no ha cesado de amparar o proteger a connotados terroristas, mientras prolonga el sufrimiento y la injusta prisión de cinco luchadores cubanos contra ese flagelo.
Sostuvo que ante esa coyuntura la nación caribeña mantendrá de manera permanente la prioridad a la defensa siguiendo las instrucciones de Fidel Castro.
Aseveró que en el escenario actual y previsible conserva total vigencia la concepción estratégica de la "Guerra de Todo el Pueblo", la cual se enriquece y perfecciona de manera constante.
Su sistema de mando y dirección, amplió, se ha visto fortalecido, incrementando las capacidades para reaccionar ante las dificultades excepcionales previstas.
Comentó que el grado de preparación del territorio nacional, como teatro de operaciones militares, se ha acrecentado de manera significativa y el armamento fundamental está protegido al igual que una parte importante de las tropas, los órganos de dirección y la población.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias deberán continuar su permanente perfeccionamiento y preservar ante la sociedad la autoridad y prestigio conquistados por su disciplina y orden en la defensa del pueblo y el socialismo, sentenció Raúl Castro.
En cinco comisiones y plenaria se discutió el Proyecto de Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, que recibió el visto bueno luego de nuevos intercambios y la amplia consulta popular.
También, el VI Congreso orientó al Gobierno la creación de una Comisión Permanente para la Implementación y Desarrollo de dichos lineamientos, sin menoscabo de las funciones de los organismos de la Administración Central del Estado.
Encargó al Comité Central trasladar recomendaciones al Parlamento para perfeccionar los órganos del Poder Popular, el sistema electoral y la división político administrativa.
Según la resolución al respecto, la experiencia acumulada en más de 35 años del sistema de órganos del Poder Popular aconseja evaluar en las actuales circunstancias y en perspectiva su organización y funcionamiento.
El VI Congreso recomendó al Parlamento, Gobierno y organismos correspondientes que elaboren y aprueben las normas jurídicas necesarias para crear la base legal e institucional que respalde las modificaciones funcionales, estructurales y económicas.
Igualmente, facultó al PCC la responsabilidad de controlar, impulsar y exigir el cumplimiento de los lineamientos aprobados, lo que presupone elevar la cultura económica de sus cuadros y militantes a todos los niveles.
NUEVO COMITÉ CENTRAL, SECRETARIADO Y BUR�" POLÍTICO
Antes de la clausura, el nuevo Comité Central, de 115 integrantes, de ellos 48 mujeres y 36 negros y mestizos, eligió a Raúl Castro y José Ramón Machado Ventura como su Primer y Segundo Secretarios, respectivamente.
El Buró Político, de 24 miembros anteriormente, tiene ahora 15, y se incluyen en esa estructura Ramiro Valdés, Abelardo Colomé Ibarra, Julio Casas Regueiro, Esteban Lazo, Ricardo Alarcón y Miguel Díaz-Canel.
También se encuentran Leopoldo Cintra Frías, Ramón Espinosa Martín, Álvaro López Miera y Salvador Valdés, quienes junto a los ya mencionados repiten del órgano precedente.
A ellos se suman como nuevos miembros Mercedes López Acea, la única mujer en el grupo, Marino Murillo y Adel Yzquierdo, cuyas promociones, como afirmó Raúl Castro, no son casuales.
Además de Machado Ventura y Lazo, componen el Secretariado José Ramón Balaguer, Abelardo Álvarez, Víctor Gaute, Olga Lidia Tapia y Misael Enamorado.
SOLIDARIDAD INTERNACIONAL
Raúl Castro expresó en la clausura del evento gratitud a los actuales países socialistas por su invariable cooperación y apoyo en todos estos años de duras batallas y sacrificios.
Los pueblos hermanos del Tercer Mundo, en especial los de América Latina y el Caribe, que se esfuerzan por transformar la herencia de siglos de dominación colonial saben que siempre contarán con nuestra solidaridad y apoyo, reafirmó.
Envió un caluroso saludo fraternal a los partidos comunistas y demás fuerzas progresistas de todo el planeta, "que luchan sin cesar, partiendo de la firme convicción de que un mundo mejor es posible".
Manifestó además el reconocimiento del pueblo cubano a todos los gobiernos que han reclamado con su voto y voz, en las Naciones Unidas, el cese del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la mayor de las Antillas.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, vaticinó el fortalecimiento de la Revolución cubana con este congreso y subrayó en un mensaje leído a los delegados que "nuestros ojos y oídos han estado sobre todas las discusiones".
Sus conclusiones, aseveró, serán material de estudio para los revolucionarios no solo de Venezuela sino de nuestra América y de toda la inmensa patria que se llama humanidad.
Aquí se siente, continuó, la fuerza inspiradora de Fidel Castro, de aquel gigante que se atrevió en abierto desafío al imperio, proclamar el carácter socialista de la Revolución cubana hace 50 años, del soldado de las ideas, porque así se autodefine este Quijote infinito.
(PL)