Girón por siempre
"De Girón se pueden sacar muchas lecciones (…) pero sí quiero señalar que (…) la importancia de Girón no está en la magnitud de la batalla, de los combatientes, de los hechos heroicos que allí tuvieron lugar; la gran trascendencia histórica de Girón no es lo que ocurrió, sino lo que no ocurrió gracias a Girón." Fidel Castro Ruz
Sangre, patriotismo, intransigencia revolucionaria, todo eso y más inundaron los combates en Playa Girón , aquellos días del mes de abril de 1961, cuando el imperialismo, por un momento, pensó apoderarse de nuestro país.
El bombardeo a los aeropuertos de San Antonio de los Baños, de Ciudad Libertad y Santiago de Cuba fue el preludio de la invasión. Por estas acciones perdieron la vida centenares de cubanos inocentes, muertos a causa del ataque enemigo.
En el sepelio de las víctimas nuestro Comandante en Jefe invitó al pueblo a jurar un compromiso de amor por la Patria, quedando así declarado el carácter socialista de la Revolución "de los humildes, por los humildes y para los humildes".
En las arenas de Girón se combatió con heroísmo y en menos de 72 horas fue derrotado el enemigo, cuyos intereses fueron frustrados por el coraje y la consagración de los revolucionarios cubanos, quienes contaban en su mayoría con muy poca edad.
Un papel primordial durante los combates lo jugó la excelente dirección de Fidel como líder indiscutible de la Revolución, quien con su extraordinaria capacidad, no sólo para dirigir sino también para combatir y constituir un ejemplo imperecedero, supo representar un guía certero para ese pueblo uniformado que demostró la determinación a ser libres y continuar adelante con la Revolución.
Girón es por sobre todas las cosas, la expresión unánime de los hombres de defender su libertad y sus intereses, es la fórmula para enfrentar las adversidades, es la voluntad inclaudicable de millones de personas en su afán por resguardar el suelo patrio y simboliza un ejemplo para el mundo por representar la primera gran derrota del imperialismo yanqui en América Latina.
Por todo lo anteriormente planteado, Fidel nos expresaría:
"(…) lo que no pueden perdonarnos los imperialistas es la dignidad, la entereza, el valor, la firmeza ideológica, el espíritu de sacrificio y el espíritu revolucionario del pueblo de Cuba. Eso es lo que no pueden perdonarnos: que hayamos hecho una Revolución socialista en las propias narices de los Estados Unidos (…) Y que esa Revolución socialista ¡la defenderemos con esos fusiles que tienen ustedes! ¡La defenderemos con el valor con que ayer nuestros artilleros antiaéreos acribillaron a balazos a los aviones agresores!”.
(Glendys Santiesteban Revolta* / Radio Santa Cruz)
* Estudiante de Periodismo