Elecciones diferentes

Antes del triunfo revolucionario se realizaban elecciones corruptas que solamente respondían a los intereses del gobierno de turno. La diferencia con las actuales es abismal, según reconoció Francisco Ramos, residente en el poblado de Haití, en este sureño municipio de la provincia de Camagüey.

“Las elecciones se hacían generalmente ofreciéndoles dinero a las personas, los candidatos tenían que gastar su capital para poder salir electos, ellos no eran nombrados por el pueblo, sino por los grupos que dirigían en aquel momento las elecciones, no como ahora que la nominación corre a cargo del pueblo. El Partido Comunista no postula, lo hace el pueblo”.

“El día de las elecciones era completamente distinto, hoy la custodia de las urnas la hacen los pioneros, además cuando se va a realizar el escrutinio se hace de forma transparente, pueden participar los que deseen. En el tiempo de antes cerraban las puertas y solo podía estar  la guardia rural, para dar la oportunidad de hacer trampas, por ejemplo  nunca había boletas en blanco, porque algunos políticos decidían el candidato que les convenía”.  

Este testimonio se repite hasta la saciedad, por quienes vivieron en anteriores gobiernos y constataron la mentira y el engaño mediante el cual se postulaban los candidatos, que a la postre representaban solo a los ricos y poderosos.

Comicios diferentes a los actuales, a pesar de lo que digan los que quieren desacreditar a Cuba y su democracia. El pueblo nomina y elige. El poder es de la mayoría y no de unos pocos. Por eso los sufragios de hoy tienen el apoyo de muchos y garantizan la continuidad del sistema político que el mismo pueblo vota. (Lisi Walcott Mora/ Radio Santa Cruz)