Villa Clara y los retos de la ganadería
Santa Clara, 13 ago.- A pesar del discreto crecimiento registrado, con más de seis mil nuevos terneros mensuales desde el pasado junio, Villa Clara asume grandes retos en el camino hacia la estabilidad y el aumento de indicadores de eficiencia en la generación de leche y carne vacunas destinadas al consumo social.
La segunda provincia, después de Camagüey, con mayor masa ganadera del país no solo enfrenta el déficit de insumos de trabajo y suplementos nutricionales condicionado por el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos a Cuba, sino también inclemencias climatológicas como la sequía, y el manejo fraudulento de los animales.
Roberto Pérez García, jefe del Departamento de Genética y Registro Pecuario en el territorio, declaró a la Agencia Cubana de Noticias que al cierre del primer semestre de 2023 se habían computado casi dos mil 500 terneros menos de los previstos hasta la fecha, lo que supone un gran desafío incluso para lograr el 60 por ciento de natalidad planificado hasta diciembre próximo.
Explicó, asimismo, que la cifra de cabezas perdidas por concepto de hurto y sacrificio ilegal superó, entre enero y junio de 2023, en cinco mil 150 al monto de igual período del año anterior, para un total de casi nueve mil 600 ejemplares desaparecidos.
Los municipios más afectados, con más de mil muertes ilícitas cada uno en lo que va de año, resultan Santa Clara, Placetas, Ranchuelo, Camajuaní y Manicaragua, situación que ubica a Villa Clara como la provincia con mayores incidencias de este tipo a nivel nacional, precisó.
Por el contrario, señaló que Corralillo incrementó sus rebaños con 780 unidades más que las censadas en 2022, resultado al que también se acercan de forma proactiva los territorios de Caibarién y Remedios, ambos ubicados en la región centro-norte del archipiélago.
En reciente encuentro realizado con autoridades agropecuarias municipales y presidido por el gobernador villaclareño, Alberto López Díaz, se acordó extremar medidas para reducir al mínimo la disminución de la masa ganadera de la región, no solo a partir del control y la vigilancia, sino también del trabajo comprometido e innovador de los productores para garantizar agua y comida a las reses.
Odel Tápanes Moya, asociado a la Cooperativa de Créditos y Servicios Filiberto Mujica González de Cifuentes, insistió en la necesidad de extender experiencias positivas como las de su equipo de trabajo, pues cuentan ‒además de los pastos naturales‒ con cerca de tres hectáreas de siembra dedicadas exclusivamente al alimento animal.
La resistencia creativa, la cultura del detalle y el compromiso con la soberanía de la nación desde la consolidación de una agricultura ecológica y sostenible tienen que ser principios básicos de las prácticas agropecuarias de la provincia, por lo que resulta imprescindible elevar resultados que contribuyan a satisfacer la demanda de leche y carne de la población, insistió López Díaz.
Con un registro neto ligeramente superior a las 120 mil vacas a inicios de enero de 2023, Villa Clara se acerca ya a las 20 mil cabezas perdidas si se tienen en cuenta las muertes naturales, y los faltantes, y las matanzas sin justificación legal, cifra que se aproxima bastante al récord de 23 mil muertes de los años 2010 y 2011. (Tomado de Agencia Cuba de Noticias)