Venezuela a las puertas de un nuevo proceso de diálogo
Durante una alocución pública desde el Palacio de Miraflores, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ratificó la víspera el compromiso del Ejecutivo bolivariano con llevar a buen término las conversaciones con la derecha, con autonomía y sin someterse a presiones externas.
‘Haremos lo que corresponde hacer para la felicidad, independencia y paz de Venezuela’, enfatizó el dignatario al reiterar la voluntad de resolver las diferencias internas por vías democráticas y avanzar en la consolidación de la paz y la reconciliación nacional.
Maduro informó que el presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), Jorge Rodríguez, encabezará la delegación del Gobierno a la mesa de diálogo, para lo cual le serán otorgados plenos poderes de cara a negociar con la oposición.
Asimismo, el jefe de Estado agradeció al Reino de Noruega y a México por sus esfuerzos para propiciar el nuevo acercamiento entre las fuerzas políticas de la nación sudamericana.
El mandatario rechazó además cualquier tipo de chantajes y amenazas del gobierno de Estados Unidos en torno a las negociaciones con la facción opositora liderada por el exdiputado Juan Guaidó, reconocido por Washington desde 2019 como presidente encargado de Venezuela.
Este jueves el portavoz del Departamento de Estado Ned Price pidió al presidente venezolano ‘sinceridad’ en las discusiones con la oposición para trabajar hacia nuevas elecciones a cambio de un alivio de las medidas coercitivas unilaterales implementadas contra el país sudamericano.
Al respecto, el canciller Jorge Arreaza condenó los reiterados intentos de la administración estadounidense de Joe Biden de interferir en los asuntos internos de Venezuela mediante presiones de carácter político y económico.
‘La arrogancia de Washington es estructural, no importa quién esté en la Casa Blanca. Los asuntos internos de Venezuela son soberanos. No nos interesan sus opiniones. Las sanciones son sencillamente ilegales y criminales. No aceptamos chantajes de nadie’, enfatizó el titular en la red social Twitter.
De hecho, el levantamiento inmediato del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto al Estado venezolano ocupa el primer punto entre las exigencias del Gobierno bolivariano en el nuevo acercamiento con la oposición extremista.
La delegación gubernamental demandará además reconocimiento de las autoridades legítimas y constitucionales del país, y exigirá a la derecha el compromiso de renunciar de una vez por todas a la ruta de la violencia y el golpismo para alcanzar sus objetivos políticos.
El Ministerio noruego de Asuntos Exteriores confirmó el miércoles que el Gobierno de Nicolás Maduro y la contraparte opositora se encontraban en la fase final de conversaciones exploratorias para iniciar el proceso de diálogo.
A través de su cuenta en Twitter, la Cancillería del país nórdico también aseguró que servirán de mediadores para esta nueva fase de negociaciones.
El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, confirmó la información suministrada por Oslo; ‘(…) las partes que participarán en el diálogo sobre Venezuela han entrado a fase final de sus pláticas exploratorias a fin de iniciar negociaciones en nuestro país’, afirmó el titular.
Un proceso anterior facilitado por Noruega en 2019, con varios ciclos de conversaciones celebrados en la nación europea y Barbados, fracasó debido al apoyo abierto de la facción opositora al recrudecimiento de las medidas coercitivas unilaterales de Estados Unidos contra Venezuela.
Maduro repudió entonces la postura entreguista del grupo político que ‘salió a hacer fiesta’ tras la decisión del mandatario Donald Trump (2017-2021) de establecer un bloqueo total a los bienes y activos venezolanos en territorio estadounidense; ‘en esas condiciones no puede haber diálogo’, indicó.
A partir de septiembre de 2019, el Gobierno bolivariano y diversos partidos de la denominada oposición democrática establecieron conversaciones que condujeron a las elecciones legislativas de diciembre de 2020 y a la reinstitucionalización de la Asamblea Nacional (Parlamento), en desacato desde 2016 hasta 2021.
(Prensa Latina)