Universidad de Camagüey aporta a la producción de alimentos y las exportaciones

Camagüey, 29 nov.- La cría intensiva del camarón en Cuba, mediante el cruzamiento genético de especies existentes en el país, se afianza entre los resultados de un proyecto conjunto de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz y empresas de la rama alimentaria.

Insertado dentro de las actividades de ciencia e innovación del centro de altos estudios para potenciar la producción de alimentos, el proyecto integra a entidades de los ministerios de la Industria Alimentaria, la Empresa Pesquera Camagüey y el Grupo Empresarial para el Desarrollo del Camarón (GEDECAM).

Pablo Galindo Llanes, vicerrector de Investigación y Posgrado, explicó a la Agencia Cubana de Noticias que lo lidera un Grupo de investigación de la Facultad de Ciencias Agropecuarias y de lnformática, y ya muestra buenos resultados en las camaroneras de Santa Cruz del Sur, Yaguanabo, en Cienfuegos, y en Manzanillo y Río Cauto; estas últimas pertenecientes a Granma.

El proyecto resalta por su alto impacto científico, pues es la primera vez que se lleva a cabo en el país, empleando específicamente el marisco litopenaeus vannamei, llamado también patiblanco​ o langostino vannamei, nativo del oriente del océano Pacífico, en un área que se extiende desde el estado de Sonora, en México, hasta el noroeste del Perú.

Con la utilización de la técnica de marcadores de polimorfismo de un solo nucleótido, la caracterización genética de bancos de reproductores es una de las tareas que permite a la camaronicultura incrementar la resistencia y evitar endogamia, o sea, la unión de especies de una misma familia.

Tras comprobarse las ventajas en el alimento de la incorporación del esfructooligosacárido, conocido como FOS, utilizado en la precría, engorde y cría de larvas de camarón, se favorece la supervivencia entre un 70 y un 80 %, contra un 50 % a un 65 % sin tratamiento, abundó Galindo Llanes.

Lo anterior repercute en el incremento de los kilogramos del marisco por cada millón de larvas sembradas, que en Cuba son aproximadamente unos mil millones, las cuales representan siete mil toneladas del crustáceo.

El programa de gestión de la innovación abarca los sistemas de alimentación en el cultivo intensivo, y como resultado se aprecia la reducción de los niveles de amonio en tanques de cría, y mayor aprovechamiento de la comida a partir del reuso de los desechos biológicos.

Igualmente incluye la producción de extensor de semen para desarrollo de alevines.

Las actividades conjuntas tienen asociado un proyecto de colaboración internacional con Bélgica que beneficia la formación doctoral, de maestría de varios especialistas y de formación de pregrado.

Por otro lado, promueve acciones de capacitación a especialistas y trabajadores del sistema para la introducción y generalización de las técnicas.

El camarón forma parte de los renglones exportables de la economía nacional, uno de los programas que la mayor de las Antillas necesita ampliar como vía de ingreso de divisas, además de su importancia en la venta en el mercado interno.

Ante esas prioridades de la provincia y el país, la Universidad de Camagüey fortalece las alianzas investigativas con diversas empresas y organismos, a fin de responder a necesidades de la ganadería, la agricultura, la agroindustria azucarera y sus derivados, entre otros sectores, encaminadas a la sostenibilidad alimentaria y disminución de importaciones. (ACN) (Foto: Archivo)