Un trasplante de islotes derivados de células madre logra independencia de insulina en diabetes tipo 1
La diabetes mellitus tipo 1, una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo, sigue siendo objeto de intensa investigación y desarrollo. A medida que los científicos avanzan en la comprensión de esta condición autoinmunitaria, surgen nuevas estrategias y tratamientos que prometen mejorar la calidad de vida de quienes la padecen, así como facilitar un mejor control de los niveles de glucosa en sangre.
En este contexto, una mujer de 25 años con diabetes tipo 1 ha comenzado a producir su propia insulina menos de tres meses después de someterse a un trasplante de células madre reprogramadas. Este estudio, publicado en la revista Cell, marca un hito, ya que se trata de la primera persona con esta enfermedad que recibe un tratamiento con células extraídas de su propio organismo.
Este trabajo se basa en los resultados de un grupo independiente en Shanghái, China, que informó en el mes de abril sobre el exitoso trasplante de islotes productores de insulina en el hígado de un hombre de 59 años con diabetes tipo 2. Al igual que en el caso anterior, los islotes se obtuvieron de células madre reprogramadas extraídas del propio organismo del paciente, quien desde entonces ha dejado de necesitar insulina.
Estas investigaciones son parte de un grupo limitado de ensayos innovadores que emplean células madre para tratar la diabetes, una enfermedad que afecta a cerca de 500 millones de personas en todo el mundo. La mayoría de los afectados sufren diabetes tipo 2, en la que el cuerpo no produce suficiente insulina o presenta dificultades para utilizar la hormona de manera efectiva. Por otro lado, en la diabetes tipo 1, el sistema inmunitario ataca las células de los islotes del páncreas.
Trasplante de islotes
Los trasplantes de islotes pueden ser una opción de tratamiento para la enfermedad, pero la escasez de donantes es un importante desafío. Además, los receptores deben someterse a un tratamiento con medicamentos inmunosupresores para prevenir el rechazo del tejido trasplantado. Las células madre tienen la capacidad de generar cualquier tipo de tejido del cuerpo y se pueden cultivar indefinidamente en laboratorio, lo que sugiere que podrían proporcionar una fuente ilimitada de tejido pancreático. Al utilizar tejido creado a partir de las propias células del paciente, los investigadores esperan, además, eliminar la necesidad de inmunosupresores.
En este estudio informan sobre los resultados de un año de un paciente como análisis preliminar de un primer ensayo clínico en humanos de fase I que evalúa la viabilidad del trasplante autólogo de islotes derivados de células madre pluripotentes inducidas químicamente (islotes CiPSC) debajo de la vaina del recto anterior abdominal para el tratamiento de la diabetes tipo 1.
En junio de 2023, la paciente se sometió a una operación que duró menos de media hora, en la cual se inyectaron aproximadamente 1,5 millones de islotes en los músculos abdominales de la mujer, marcando un nuevo enfoque para los trasplantes de islotes. Según los investigadores, a diferencia de la mayoría de los trasplantes, que se inyectan en el hígado y no permiten observar las células, la colocación en el abdomen permite a los investigadores monitorear las células mediante imágenes por resonancia magnética y, si es necesario, eliminarlas.
En concreto, la paciente logró mantener una independencia sostenida de insulina a partir de los 75 días posteriores al trasplante. El tiempo en el rango de glucemia objetivo del paciente aumentó de un valor inicial del 43,18 al 96,21 por ciento al cuarto mes después del trasplante, acompañado de una disminución en la hemoglobina glucosilada, un indicador de los niveles de glucosa sistémica a largo plazo, alcanzando niveles no diabéticos. A partir de ese momento, la paciente presentó un estado de control glucémico estable, con un tiempo en el rango de glucemia objetivo superior al 98 por ciento y una hemoglobina glucosilada de alrededor del cinco por ciento.
Al cabo de un año, los datos clínicos cumplieron con todos los criterios de valoración del estudio sin evidencias de anomalías relacionadas con el trasplante. Estos resultados prometedores fomentan la necesidad de que se justifican más estudios clínicos para evaluar el trasplante de islotes de CiPSC en la diabetes tipo 1.
Dado que la mujer ya estaba recibiendo inmunosupresorespor un trasplante de hígado previo, los investigadores no pudieron evaluar si las células iPS reducían el riesgo de rechazo del injerto. Aunque el organismo no rechaza el trasplante al no considerar las células como “extrañas”, en personas con diabetes tipo 1, que padecen una enfermedad autoinmune, existe el riesgo de que el cuerpo ataque a los islotes trasplantados, aseguran los investigadores. No obstante, el equipo está trabajando en el desarrollo de células que puedan evadir esta respuesta autoinmune. (Tomado de Infomed)