Tras fracasos, Rusia encara reto en Estación Espacial Internacional
Moscú, 18 may. -Tras sufrir tres situaciones de emergencias cósmicas en las últimas semanas, Rusia intenta nuevamente hoy elevar la órbita de la Estación Espacial Internacional (EEI) con la ayuda del acoplado carguero Progress M-26M, confirmó Roscosmos. Una fuente no identificada del sector, citada por la agencia Novosti, aseguró que según el plan preliminar la hora señalada para iniciar las operaciones eran las 03:30 de este lunes.
Esta misión debió cumplirse poco después de la medianoche del sábado último, pero en el momento previsto los motores de la Progress M-26M no funcionaron y el radio de la órbita de la EEI no fue corregido, se informó.
Roscosmos explicó que los motores debieron trabajar durante unos 15 minutos y elevar la órbita dos mil 800 metros, hasta 402 kilómetros.
Dentro del laboratorio orbital trabajan en estos momentos los cosmonautas rusos Guennadi Podalka, Mijail Kornienko y Antón Akhaplerov, junto a los austronautas norteamericanos Scott Kelly y Terry Virts, y Samantha Christoforetti, de la Agencia Espacial Europea.
Otra Progress, la M-27M, inició el 28 de abril la más reciente cadena de reveses del programa espacial ruso cuando fue disparada desde el cosmódromo de Baikonur, Kazajstán, con un cohete propulsor Soyuz que la colocó en una órbita más alta que la estimada. Tal situación frustró su acoplamiento a la EEI en régimen autónomo con toneladas de combustible, alimentos, oxígeno y equipos científicos, que se incineraron con el ingenio tras varios días de trayectoria descontrolada en descenso hacia su desintegración en la atmósfera terrestre.
Sin embargo, en la mañana del sábado último ocurrió el incidente que pudiera significar el colmo de la paciencia del Ejecutivo de Rusia en relación con la esfera espacial.
Una falla del motor de la tercera etapa del cohete portador ruso Protón-M en el segundo 497 de su vuelo, a 161 kilómetros de altura, impidió la puesta en órbita del satélite mexicano de comunicaciones MexSat Centenario (MexSat-1) contratada a Roscosmos.
El misil de la corporación espacial rusa despegó exitosamente a las 08:48 (hora de Moscú) con la misión de colocar el satélite en una posición geoestacionaria correspondiente a la posición orbital de 113 grados oeste, desde donde podría ofrecer servicios de telecomunicaciones para México y parte de Suramérica.
Las fuentes explicaron que el aparato debía alcanzar una órbita de 36 mil kilómetros, pero no se separó de la tercera etapa del cohete portador, por lo cual quedó fuera de control y se encendió.
Según Roscosmos, varias toneladas de combustible tóxico pudieron derramarse sobre Siberia, procedente del acelerador Briz-M, cuyos motores todavía no se habían encendido cuando sucedió la avería.
Inicialmente programado para el 29 de abril, el lanzamiento del Protón con el MexSat-1 fue postergado a instancias de la Agencia Espacial Mexicana porque el fabricante del satélite solicitó más tiempo para revisar el equipamiento de a bordo. El ingenio de 4,5 toneladas de peso fue construido por Boeing Satellyte Sistems para el Gobierno mexicano.
Una fuente no identificada del sector espacial ruso dijo a Novosti que la descuidada selección de los bloques de los cohetes Protón-M, sin tener en cuenta su calidad, y la insuficiente preparación del personal, que trabaja por bajos salarios, son las causas de estos desastres.
Es un reflejo de toda una degradación sistémica en la producción de la tecnología espacial nacional, en particular en los cohetes portadores Protón, añadió.
Significó el informante no identificado por Novosti que estos misiles en su tiempo tuvieron un nivel mínimo de fallos.
Es evidente que la inestabilidad general en el sector y los bajos salarios pueden haber conducido a la mala calidad que impide los lanzamientos exitosos de los cohetes portadores, dijo.
Por su parte, el primer ministro, Dmitri Medevedev, ordenó convocar una comisión para establecer las causas exactas de lo sucedido, y pidió que cuando su conclusión esté disponible se le presenten propuestas de responsabilidades individuales y materiales por el fracaso del Protón-M.
De momento, los lanzamientos de este tipo de cohetes están suspendidos.