Resaltan en Cuba retos del país en aniversario del Asalto al Moncada

La Habana, 25 jul.- El diario Granma, Órgano Oficial del Partido Comunista de Cuba, resalta en un editorial que la Revolución Cubana arriba al aniversario 67 del Asalto al Moncada llena de energías renovadas, en un año de retos y tensiones.

 

A las dificultades se sumaron los desafíos extraordinarios de la pandemia de la que nos recuperamos, expresa el rotativo, y a continuación destaca que la firme voluntad de vencer propicia llegar con orgullo y optimismo a esta fecha, ‘que celebraremos con la prudencia requerida ante la situación sanitaria’ por los efectos de la Covid-19.

Con la fe puesta en la bondad y grandeza de lo creado, ha vuelto a prevalecer la unidad del pueblo cubano, la solidaridad y la disciplina en el cumplimiento de la estrategia aprobada por el Partido, y conducida por el Gobierno y los Consejos de Defensa, añade el editorial de Granma titulado El Moncada ilumina el destino de Cuba.

Señala además que en eso resultó determinante la fortaleza de un sistema de Salud articulado desde la comunidad, la participación del saber científico acumulado en la toma de decisiones, el trabajo de las organizaciones de masas y el oportuno seguimiento de nuestros medios de comunicación.

Enfrentamos este escenario a partir de la obra ejemplar del líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro, ‘quien nos formó con una vocación humanista y nos legó todo ese caudal de fuerzas integradas, e instituciones y profesionales que han vuelto a demostrar la entrega digna y la capacidad conmovedora de Cuba socialista’, acota el texto.

Todo lo vivido es suficiente para ratificar que el 26 de Julio marcó el inicio de una nueva era en la historia cubana, agrega el editorial al referirse al Asalto a los cuarteles Moncada, de Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, el 26 de julio de 1953, fecha considerada en la isla como el Día de la Rebeldía Nacional.

Quienes no dejaron morir las ideas del Apóstol con ese colosal asalto a la segunda fortaleza militar de Cuba, junto al cuartel Carlos Manuel de Céspedes de Bayamo, han reconocido que nunca sospecharon haber llegado hasta estos días tras más de seis décadas de lucha continuada, agrega.

Ni siquiera cuando, en cumplimiento de la orden del Comandante en Jefe, entraron triunfantes a Santiago de Cuba el primero de enero de 1959, exactamente cinco años, cinco meses y cinco días después del Moncada, señala.

Esos jóvenes de espíritu diferente, a puro amor de hijos y desinterés de héroes, hicieron suya la causa de los mambises que -recuerda el texto- en 1868, con Céspedes a la cabeza, iniciaron la guerra contra el yugo español; como no abandonaron el ideal de Maceo y Gómez, con quienes José Martí en 1895 retomó la gesta libertaria, hasta que la victoria fue usurpada con la intervención norteamericana.

Ni siquiera en esas difíciles circunstancias se apagó la llama redentora, enarbolada por figuras de la talla de Baliño, Mella, Villena, Guiteras y Jesús Menéndez, entre muchos otros, añade el texto publicado en Granma en la noche de este viernes.

Resalta que fue ese el afán que motivó a la Generación del Centenario, bajo la conducción de Fidel, a asaltar los cuarteles el 26 de julio de 1953, ­dispuesta a no tolerar, a 100 años del nacimiento de Martí, los crímenes de una tiranía sangrienta subordinada a Estados Unidos.

Luego del revés militar y del vil asesinato de muchos de sus hermanos de lucha, lograron sobreponerse a las vejaciones de la prisión, y convirtieron esta etapa en un aprendizaje fecundo, recuerda el rotativo.

También soportaron el duro golpe de Alegría de Pío y se adentraron en la Sierra Maestra para empezar la contienda guerrillera del naciente Ejército Rebelde, cuyo Comandante en Jefe, con su indiscutible liderazgo, supo forjar la unidad de todas las fuerzas revolucionarias y conducirlas a la victoria del primero de enero de 1959.

Se iniciaba entonces otra etapa que estremecería los cimientos de la sociedad cubana. Las premonitorias palabras de Fidel, expresadas el 8 de enero a su llegada a La Habana, no tardaron en hacerse realidad: ‘La tiranía ha sido derrocada, la alegría es inmensa y sin embargo queda mucho por hacer todavía?’, agrega el texto.

Granma señala además que la Revolución heredó un cuadro de desgobierno, corrupción, analfabetismo, prostitución, miserias y desigualdades. En su alegato La historia me absolverá, Fidel denunció con cifras que no admitían réplica la dramática situación de nuestro pueblo, 55 años después de la intervención norteamericana.

A partir del cumplimiento del Programa del Moncada, el pueblo fue dueño de la tierra, las industrias y las viviendas, se alfabetizó y se construyeron escuelas y universidades, se prepararon médicos para Cuba y el mundo, y se sentaron las bases para democratizar los espacios de creación, difusión y acceso a la cultura.

En esencia, se hizo realidad el profundo anhelo martiano, que preside la nueva Constitución, del culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre, agrega.

De acuerdo con el editorial, la Revolución, como expresara nuestro Primer Secretario del Comité Central del Partido, General de ­Ejército Raúl Castro, puso fin a varios mitos, entre ellos, el de que no era posible construir el socialismo en una pequeña isla a 90 millas de Estados Unidos.

Una Revolución que no fue consecuencia de una confrontación internacional, que no solo sustituyó un poder por otro, sino disolvió la maquinaria represiva del régimen dictatorial y sentó las bases de una sociedad nueva, construyó un ejército que es el pueblo uniformado, y elaboró, para defenderse, su propia doctrina militar, la guerra de todo el pueblo, agrega.

En una comprensión que puede ser más honda, es imposible olvidar los heroicos sacrificios ante la larga lista de hechos que se han debido enfrentar.

El diario recuerda además la ruptura de relaciones diplomáticas por todos los países latinoamericanos, con la honrosa excepción de México; la invasión de Playa Girón; el genocida bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos.

También se refiere a la masiva campaña mediática difamatoria contra el proceso emancipador y sus líderes, en especial contra Fidel, objetivo de más de 600 planes de atentado.

Todo eso además de la Crisis de Octubre; el secuestro y ataques a embarcaciones y aeronaves civiles, y las canalladas que han provocado el terrible saldo, hasta ahora, de tres mil 478 muertos y dos mil 99 incapacitados, señala el editorial.

Estos últimos 62 años, señala, estuvieron marcados por la incesante lucha frente a los designios de 12 administraciones estadounidenses, que no han abandonado los propósitos de cambiar el orden político, económico y social que elegimos; ni apagar el ejemplo de Cuba en la región y el resto del mundo, y reinstaurar el dominio imperialista sobre nuestro archipiélago.

El texto recuerda que la isla caribeña recibió el abrazo noble y generoso de muchos pueblos hermanos, al tiempo que brindó su solidaridad en distintas regiones, haciendo valer la altura del amor de Martí hacia la humanidad.

El pueblo heroico de ayer y de hoy, orgulloso de su historia y cultura nacionales, se fue curtiendo en difíciles frentes, y ha sabido hacer mucho con muy poco sin desalentarse.

Esta es una prueba decisiva -señala- de su tenacidad y su inconmovible firmeza durante el período especial a que nos vimos sometidos como consecuencia de la desaparición del campo socialista y de la Unión Soviética.

Cuando nadie en el mundo habría apostado por la supervivencia de la Revolución, este pueblo resistió y demostró que sí se puede sin hacer concesiones en sus principios éticos y humanitarios, y mereció el inestimable apoyo de los movimientos de solidaridad que nunca dejaron de creer en el ejemplo que emana de la actuación de nuestra gente, destaca el editorial.

Denuncia además Granma que con el ánimo de promover rupturas generacionales y la incertidumbre para desmantelar desde dentro al socialismo, también se afanan en vender a los más jóvenes las supuestas ventajas de prescindir de ideologías y conciencia social.

Dimos pruebas suficientes de que el socialismo lo defendemos porque creemos en la justicia, en el desarrollo equilibrado y sostenible, en la solidaridad y en la democracia del pueblo y no en el poder del capital, acota el periódico.

Repudiamos las manifestaciones de discriminación y combatimos el crimen organizado, el narcotráfico, el terrorismo, la trata de personas y todas las formas de esclavitud, y defendemos los derechos humanos de los ciudadanos, afirma el editorial.

Cuba no solo libra grandes batallas en el campo de las ideas, señala, sino que se enfrenta además a problemas asociados a la crisis mundial, quizá la más aguda que haya vivido la humanidad, a partir de esta pandemia.

A esto se añade como invariable telón de fondo, de acuerdo con el rotativo, la redoblada agresividad del Gobierno de Estados Unidos, que promueve sistemáticas acciones para obstaculizar el desempeño de la economía nacional y asfixiar al pueblo.

Con el conjunto de medidas concebidas para enfrentar las actuales condiciones de la economía nacional y, sobre todo, dinamizarla, crece el desafío de comprender los alcances de esta transformación orientada además a la defensa de la soberanía y a la exploración de caminos hacia el desarrollo, señala el Órgano del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

Pese a enemigos y manipuladores, pese a quienes todavía no lo entienden, el pueblo cubano hará valer otra vez, como en aquel histórico 26, la suprema fortaleza de su espiritualidad en su búsqueda incansable de un mejor país, afirma el rotativo.

Cuando la gesta del Moncada es presencia viva en la memoria y en el aliento renovado, Cuba cuenta con toda su gente y, muy especialmente, con la sabiduría y fuerza apasionada de sus jóvenes, en quienes habita el fulgor perenne de los que a su edad supieron derrumbar los muros de la ignominia para enaltecer el alma de la Patria, culmina el Editorial de Granma. (Prensa Latina)