Al sur

Permanece en memoria de santacruceños epopeya internacionalista de Angola (+ Fotos)

Santa Cruz del Sur, 7 dic.- La activa presencia solidaria de jóvenes cubanos en la guerra de Angola, para defender la independencia de la hermana tierra, ha quedado simbolizada en la historia de esta Isla y África.

Hazañas, sacrificios y destacado deber internacionalista están escritos en el fuego, la pólvora y la sangre derramada de cubanos y angolanos.

Ramón Aranda Rodríguez, de 1981 hasta 1983, estuvo en Quambo, primero como soldado de la reserva, luego formó parte de las tropas de la lucha contra bandidos.

Cuenta que participó en 18 enfrentamientos con el enemigo. En uno de esos combates, dijo, un compañero suyo fue herido en una pierna siendo necesario trasladarlo para el archipiélago a recibir atención médica especializada.

Para el lugareño haber sido partícipe de ese accionar significó crecerse como hombre y revolucionario. En esa lejana geografía, aseguró, supo demostrar su valor y entereza ilimitados.

Miguel Ángel Cañete Torres es profesor de Informática en el preuniversitario Henry Reeve. Fidel, expuso el educador, dijo en una oportunidad que era una deuda ayudar a la hermana nación a ser libre y soberana.

La unidad indestructible de cubanos y angolanos, afirmó el entrevistado, constituyó la derrota definitiva del apartheid y permitió la independencia de Namibia. Son temas, agregó, que los analiza con sus estudiantes de la enseñanza media superior en el aula y matutinos.

El 7 de diciembre es fecha de tributo a los caídos en la defensa de la justicia y la igualdad en Angola y otras regiones de África. Kelvin Rodríguez Oliva, alumno del Henry Reeve lo tiene muy presente. El heroísmo de los muertos y los que regresaron a abrazar la bandera de esta República martiana y fidelista, aseveró, merecen respeto perpetuo.

Vuelve a levantarse la fuerza guerrera del Lugarteniente General Antonio Maceo y su ayudante el Capitán Panchito Gómez Toro. Cuba honra el legado de estos hombres, modelos de patriotismo, que el pueblo mambí y rebelde ha sabido enaltecer.