México pidió cambios en ONU y levantar el bloqueo a Cuba
También exigió el levantamiento del bloqueo a Cuba, una demanda repetida por López Obrador en los últimos meses y que resulta impostergable ante la severa crisis económica y sanitaria a nivel global.
En lugar de medidas unilaterales, debemos poner en marcha medidas de solidaridad y apoyo mutuo para impulsar el crecimiento económico y el desarrollo de nuestros pueblos, expresó.
Ebrard dijo que México estuvo en la fundación de la ONU hace 76 años y sigue comprometido con sus principios y con la Carta. Toca a esta generación hacer los ajustes que los tiempos exigen y que nuestros pueblos demandan, acotó.
Señaló que la pandemia de Covid-19 puso de manifiesto la necesidad de un sistema multilateral fuerte y eficaz, y consideró inaceptable que se cierren los espacios de la solidaridad más elemental entre los estados.
En cambio, agregó, nos enfrentamos a mayor desinformación, negación de la evidencia científica y repliegue xenofóbico de sectores enteros de nuestras sociedades.
Afirmó que esta crisis sin precedentes no puede superarse con acciones unilaterales o aisladas, sino mediante una renovada cooperación y genuina solidaridad internacional.
Respecto a una reforma del Consejo de Seguridad, el canciller sostuvo que México continuará siendo un actor constructivo a fin de que este órgano sea más representativo, democrático, transparente y eficiente.
La pretendida creación de nuevos asientos permanentes es contraria a la igualdad soberana de los Estados y a los principios esenciales de la democracia, señaló.
Una reforma que incremente únicamente los asientos no permanentes, con mandatos de largo plazo y con posibilidad de reelección inmediata es viable y representaría un cambio de fondo en el funcionamiento del órgano, a quien encomendamos el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, afirmó.
Ante la frecuente parálisis del Consejo de Seguridad para cumplir con su responsabilidad en ciertos conflictos en los que se cometen atrocidades masivas, México y Francia propusieron regular el derecho de veto de los cinco miembros permanentes.
Más de un centenar de estados nos respaldan en esta iniciativa que continuaremos impulsando, advirtió Ebrard.