En Santiago de Cuba originales muestras de alegato de Fidel Castro

Santiago de Cuba, 17 oct .-Piezas bibliográficas originales relacionadas con el alegato de Fidel Castro conocido como La historia me absolverá, pueden apreciarse desde hoy, a 65 años de su pronunciamiento, en el museo Abel Santamaría, de esta ciudad.

 

Entre lo más llamativo, se muestran tres añejos ejemplares de ese documento, editados en medio de la más absoluta clandestinidad, tras el juicio realizado en la salita de enfermeras del antiguo hospital civil y el posterior encarcelamiento del joven abogado que encabezó el asalto al Cuartel Moncada el 26 de julio de 1953.

Publicaciones en el sistema braille, una versión en décimas creadas por el puertorriqueño Juan Camaño y tres en miniatura atraen la atención de los visitantes a esa instalación, nombrada en homenaje a quien fuera segundo jefe de la acción y responsable de tomar ese enclave sanitario aquel domingo.

En una de las 14 pancartas se leen opiniones de personalidades mundiales como el poeta español Rafael Alberti, cuyas palabras aseguran que las ideas como las defendidas entonces por Fidel no envejecen y lo comparan con la imagen de un héroe homérico, esperanzadora luz de un futuro mejor.

El bardo brasileño Thiago de Melo dice que el líder es el hombre más rico del planeta porque tiene lo que no compra todo el dinero del mundo: el amor de su pueblo, en tanto que el presidente boliviano Evo Morales afirma que enseñó a los latinoamericanos a vivir con dignidad y a luchar por ella.

‘Ojalá yo pudiera sentir algún día que he sido merecedor de esa frase’ afirmó en el 2005 el expresidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien añadió que Fidel ya fue absuelto por la historia.

Otras valoraciones expuestas corresponden al pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, el escritor uruguayo Mario Benedetti y el trovador cubano Silvio Rodríguez, junto a las de sus compañeros de luchas, Lázaro Peña y Vilma Espín.

Considerado como la obra política, revolucionaria y jurídica más importante en el siglo XX en Cuba, La historia me absolverá, nombre tomado por la frase pronunciada al final, trascendió como denuncia de los males acarreados por el sistema capitalista a los cubanos y proyección para salir de ese sombrío legado. (PL)